Domingos al rojo

ADVERTÍA EN la columna del domingo, lo animada que se ponía su noche entre las generalistas, con Cruz y raya.com en La Primera, Manolito Gafotas en Antena 3 y Siete vidas en Tele 5, sin olvidar la nueva propuesta de TVG, el concurso Noite brava , que habrá barrido como mínimo en Guitiriz y en Xinxo de Limia, las dos vilas a competición. A un lado lo que haya recogido Sofres, con un inevitable ganador en audiencia sobre el resto, anótese que habrán superado los diez millones en su conjunto, que es una cifra muy respetable para la víspera del maldito lunes y su sinónimo de curro... Sumemos el pequeño pero respetable aporte de La 2 y vayamos al grano. Asumido que el invierno es estación hogareña, que fuera va un frío que pela y la lluvia te pone como una sopa, aparte las telarañas de los bolsillos (las rebajas son insaciables...), se sabe que son meses de picos muy altos en consumo televisivo. Añadamos que la tendencia es tragar todo lo que se emite. Sin embargo, la noche del domingo (también la tarde) es tiempo de descanso para la tele de la náusea y el vómito verbal. Por increíble que parezca, no hay corazón . La escatología concede tregua a la audiencia. Confirma el error de los gurús de la telebasura cuando afirman que dan a la gente lo que les piden. Vale: la noche del domingo dan humor y entretenimiento, y las cifras son magníficas. Anótese que nadie echa de menos la sandez.