La Carmen más sangrienta y sangrante

¿Cómo conseguir que un mito tan manido como el Carmen resulte original? La respuesta es: con talento. Gustavo Tambascio ha vapuleado el personaje creado por Próspero Mérimeé, que inspiró la mejor ópera de Bizet. El texto original, cargado de tópicos, que en buena medida han marcado en el exterior la imagen de España -y ni que decir tiene, de la mujer española-, da pie a Gentiles Producciones para un montaje que encaja en casi todos y en ningún género. Un thriller de terror-cómico, que salpica de sangre y risas a los espectadores, que contemplan atónitos el desfile de una galería de personajes histriónicos: Carmen, la gitana asesina; José Lizarrabengoa, el psicópata vasco; junto al propio autor del libreto, un Próspero Mérimeé que se disfraza de torero, gitana, contrabandista o funcionario inglés. Trinidad Iglesias, Emilio Gavira y Manu Rodríguez están espléndidos en la «piel» de estos atroces personajes bordan sus esperpénticos papeles, que suiguen el ritmo a la pianista Cristina Alonso. Sin parangón que ninguna versión precedente, Tambascio construye una ópera sangrienta en la que Don José es Josetxu Lizarrabengoa, un vasco-navarro de pura cepa, más conocido por el psicópata vasco. Micaela es Begotxu, corpulenta vasca, portadora de bacalao al pil-pil cocinado por la amatxu. Carmen, la gitana asesina, seduce a José mediante la viagra que le proporciona Merimée y lee las palmas de las manos a los espectadores. Escamillo es un bombero torero... Una auténtica locura que, lejos de desmerecer el texto en el que se inspira, digamos que lo pone al día desde una versión surrealista, en la que hasta ahora no habían caído las muchas compañías que han adaptado e interpretado la obra cumbre de Mérimeé. Aunque a priori el montaje pueda parecer producto de los excesos de una mente enfermiza, el resultado es un ejercicio desbordante de imaginación. Hora: Mañana a las 21.00 horas en el Auditorio. Precio: 9 euros.