Un taller en silencio
El Taller de Vidrieras que dirige el maestro Luis García Zurdo ha vuelto al trabajo después de meses de inactividad forzosa. El taller, que realiza desde hace años una labor «silenciosa» de curación de los vitrales, ha iniciado la recuperación de tres vidrieras de la planta baja, de unos veinte metros cuadrados de superficie cada una. La Junta asignó una partida de 322.250 euros para estas obras. Una vez finalizadas las tres vidrieras, se iniciará la rehabilitación de los vitrales de la parte superior de la Catedral. De los 1.800 metros cuadrados de vitrales, el taller ha podido salvar ya 400 metros.