Diario de León

«Lo único que sé es hacer reír»

Héctor de Miguel, Quequé, estará el fin de semana en el Teatro Emperador con el espectáculo «El Club de la Comedia», acompañado de Bermúdez, Goyo Jiménez y Agustín Jiménez

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Ricardo Suárez - león
León

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Ha trabajado en la radio, como camarero, de disc-jockey, en una hamburguesería, dando clases de inglés, canta, escribe, compone y ha ganado varios concursos de relatos. Pero el público le conoce por su participación en El Club de la Comedia y, sobre todo, por su colaboración en La noche con Fuentes y Cia . Héctor de Miguel, conocido como Quequé, acude este fin de semana a León para tomar parte en Noches de cómicos y sus historias contradictorias ; un espectáculo, que permanecerá hasta el domingo en el Teatro Emperador, en el que estará acompañado de Bermúdez, Goyo Jiménez y Agustín Jiménez. «Lo de Quequé es sólo en mi vida artística, además no tiene ningún significado, es una cosa de mi hermana cuando era pequeña, me llamaba así. Cuando me empecé a dedicar a esto me lo puse, me hacía gracia», rememora este auténtico todoterreno del humor que comenzó a saborear el éxito cuando ganó el festival Imaginarock en 1998. «Me presenté haciendo de cantautor, digamos que un poco especial, muy bruto, con canciones que al principio parecen de amor y tal, pero luego se van calentando, ya sabes. Creo que eso fue lo que le hizo gracia al jurado, todo eran grupos de rock y pop y de repente sale un colgao con coleta. En ese momento estaba muy influenciado por gente como Toreros Muertos, La Mandrágora, Wyoming, el tipo de música que juega con el humor, eso era lo que yo quería hacer». Quequé, que ha demostrado sobradamente su eficacia en el arte del monólogo, tiene también amplia experiencia radiofónica en su trayectoria artística. Sus colaboraciones en programas como A media tarde (en Cadena 100) o Puerto Latino (en Cadena Dial) le han dejado una profunda huella. Su dispersión laboral se aclara cuando se le pregunta si es actor, escritor, cómico, cantante... «No lo sé, sólo que hay unas cosas que me gustan más que otras, y que la que más me gusta, sin duda, es la radio. Es donde mejor me lo he pasado, te permite jugar, tienes libertad de creación. La radio tiene mucho más encanto que la televisión y que cualquier otra cosa». Lo que también queda claro cuando se habla con él es el terreno en el que mejor se desenvuelve; el humor. «No sé si sabré ser serio en la vida (risas) pero normalmente, haga lo que haga, radio, música, televisión o lo que sea, sólo sé hacer humor, un humor que entiendo perfectamente que haya gente que le guste y gente que no», afirma un trabajador de fondo que, de la noche a la mañana, le reconocen por la calle y le piden autógrafos. «Sí.., pero tampoco es una cosa... El programa de Fuentes lo ve mucha gente, pero hay mucha más gente que no lo ve, no es un programa de prime-time , es un l ate night . Sinceramente, la televisión que se lleva actualmente, la que está de moda, no es la que hacemos nosotros, ni mucho menos. Con lo cual, tienes una popularidad muy relativa, te conoce un sector de gente muy específico, que le gusta el sentido del humor y que está cansada de tanto personaje. Están quitando (las televisiones) trabajo a los guionistas haciendo cosas que no tienen sentido, sin ningún mérito. Fíjate lo que se ahorran en guión llevando a Pocholo a decir tonterías». Otro tipo de tonterías, con mucha más gracia, sensatez y profundidad, serán las que digan estos maestros del humor en sus cuatro citas leonesas. «Se trata de hacer un programa de El Club de la Comedia con la gente de León. Hay un presentador, que es Bermúdez, y dos cómicos que son ahora mismo la punta de lanza de los monólogos, que son Goyo Jiménez y Agustín Jiménez, que no son hermanos ni nada, y cada uno en su estilo son auténticas máquinas, les he visto darle la vuelta al teatro (risas), son terremotos del humor. Nuestra única pretensión es hacer reír durante una hora y media, bueno, y ligar y eso, si se puede». Aunque el tema a tratar lo decide una hora antes de la actuación, Quequé admite que la audiencia es quien determina el desarrollo. «La improvisación depende casi más del público que de nosotros». Viernes: 22.00 Sábado: 22.00 y 22.30 Domingo: 22.00 Precios: 13-17 euros Lugar: Teatro Emperador

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