En el concierto del Auditorio actuará como solista el pianista Boris Guiltburg, un virtuoso ruso
La Sinfónica de Asturias llega hoy con Gomis, Prokofiev y Tchaikovsky
La orquesta, dirigida por Enrique Bátiz, interpretará «El diablo en Sevilla» y «Sinfonía polaca»
Un extraordinario concierto es el que esta noche ofrecerá en el Auditorio la Orquesta del Principado de Asturias con el solista ruso Boris Guiltburg y todos ellos bajo la dirección de Enrique Bátiz, quienes pondrán en atril obras de Gomis, El diablo en Sevilla; Prokofiev, Concierto para painao y orquesta nº3; y Tchaikovsky, Sinfonía nº3 polaca en Re Mayor, op.29. Hace escasamente un año el extraordinario Boris Guiltburg tocó en Valladolid y unos meses antes lo pudimos ver alzarse con uno de los premios de piano más prestigiosos del mundo, como es el Paloma O¿Shea de Santander, donde obtuvo el segundo premio, ya que el primero se declaró desierto. En Valladolid Boris dejó en la audiencia una excelente impresión por la calidad de su pianismo, la transparencia de su fraseo, el apabullante virtuosismo y la seguridad en los ataques, brindando todo un recital de la mejor escuela rusa. Al concluir la actuación no estaba nada contento con lo que acababa de hacer, algo que me sorprendió dada la calidad de lo escuchado. Pero el genial y joven pianista se refería a esa comunicación que existe en todo concierto con el público, «al que no acabé de tomar el pulso. Además la sequedad de la sala no ayudó mucho». Insistí, pero, dijo «¿qué entiendes por un buen concierto?». Me miró entre desconcertado y sorprendido y me espetó: « Cuando no se escucha ni el vuelo de una mosca dos segundos después de dar la última nota. Si hay toses, bravos desaforados o aplausos dubitativos, entonces debes pensar si lo que has ofrecido ha llegado a la audiencia o te aplauden por cortesía o por el currículum». Así es este joven pianista ruso de 20 años que estudió con su madre las primeras notas a los cinco años y pasó por la escuela de Israel, un auténtico perfeccionista. En la actualidad estudia con Arie Vardi en Israel. A pesar de su juventud, su destacada actividad artística le llevó a Alemania, Francia, Italia, Austria, Portugal e Israel y, entre otras, a las salas de la Unesco y Alfred Cortot, de París; Mozarteum, de Salzburgo, y Steinway Hall, de Londres. En 1998 fue solista de la Orquesta de Cámara de Israel, bajo la dirección de Philippe Entremont, durante una gira de conciertos por EE.UU. También ha actuado con la London Soloists Chamber Orchestra, BBC National Orchestra of Wales y con las Filarmónicas de Stuttgart y Baden Baden. Su excepcional talento lo avalan numerosos premios en importantes concursos internacionales de piano entre los que se cuentan los primeros galardones de los concursos de Roma (1999), Ettlingen (1998) y Newport (1997). Hora: 20.30. Lugar: Auditorio Ciudad de León. Entradas: 18 euros (platea) y 12 euros (anfi-teatro).