Llega también a cartelera «La vida que te espera», de Gutiérrez Aragón
El romanticismo de Kidman y la sexualidad de Meg Ryan
«Cold Mountain», de Anthony Minghella, está entre las favoritas en la carrera por los Oscar
El realizador Anthony Minghella, que alcanzó la popularidad con El paciente inglés, una cinta sobrevalorada que, inexplicablemente, obtuvo nueve premios Oscar, ha querido repetir la misma jugada artística y comercial adaptando la novela de Charles Frazier Monte frío. Pero parece ser que las intenciones iniciales no han dado el resultado previsto y Cold Mountain (una nueva lección de la lengua de Shakespeare que amablemente nos ofrecen distribuidores y exhibidores) ha sido un rotundo fracaso, al menos en lo que a premios se refiere. Pese a contar con un espectacular reparto, encabezado por Jude Law, Nicole Kidman y Renée Zellweger, la historia de un soldado desertor que abandona el campo de batalla para reencontrarse con su amada no termina de cuajar entre cierto sector de la crítica. Dividida en varios episodios, una decisión que termina yendo en detrimento de la propia narración, ya que se fragmenta más de lo que en un principio parece necesario, la historia del largo viaje que emprende el soldado, y la otra, paralela, que nos muestra el transcurrir vital del objeto de su amor, cuenta, sin embargo, con todos los elementos necesarios para gustar. La fotografía, el vestuario, la música y todo lo referente a la producción, despide un aire de calidad y preciosismo que se ve perjudicado por, a decir de quienes la han visto, la torpeza del realizador a la hora de dirigir a sus actores. La propia Kidman, en el momento cumbre de su carrera, se ve perjudicada por un personaje (que pese a llegar a pasar hambre, no se despeina ni desmaquilla nunca) marcado por la necesidad de una química, la suya con Jude Law, que no se produce. Mejor parada ha salido la oronda protagonista de Bridget Jones que se ha hecho acreedora del Globo de Oro a la Mejor Actriz Secundaria, un reconocimiento obtenido por un papel en el que abundan las muecas y los histerismos. En el resto del reparto nos encontramos nombres como los de Nathalie Portman, Brendan Gleeson, Philip Seymour Hoffman, Donald Sutherland o Giovanni Ribisi. Más pausada y personal es la propuesta de Manuel Gutiérrez Aragón en La vida que te espera, que acaba de participar en el Festival de Berlín, con la que el cineasta rememora los paisajes pasiegos de su infancia. La propiedad de un ternero es el desencadenante de un poderoso drama en el que se entremezclan problemas económicos, de odios, y pasiones amorosas. Luis Tosar, Marta Etura, Clara Lago, Celso Bugallo y Juan Diego, son los protagonistas de un relato, escrito por el autor de Habla Mudita, Demonios en el jardín o La mitad del cielo , con el que el realizador cántabro alcanza la realización número dieciséis de su interesante filmografía. También interesante, aunque en otros términos, es el cambio de registro que lleva a cabo Meg Ryan en la película En carne viva. La que fuera novia de América durante años, hasta que llegó Julia Roberts, se atreve a meterse en la piel de un personaje, que se desnuda física y emocionalmente, de la mano de la controvertida realizadora Jane Campion, autora de cintas como El piano o Retrato de una dama. Aún siendo lo más comentado la fuerte carga sexual de la película, en la que nuestra rubia protagonista muestra una sorprendente capacidad de adaptación, hay que detenerse también en el excelente trabajo interpretativo de todo el reparto, incluidos Mark Ruffaloy Jennifer Jason Leigh. Sin ningún compromiso, más que divertir, a algunos, se presenta Doce en casa, con Steve Martin haciendo un papel visto mil veces. De hecho, es un remake del clásico de la comedia Trece por docena . Hollywood sigue con el encefalograma plano.