«Una España se ríe de la otra media»

El cine ha retratado la dificultad de convivencia de parejas artísticas de larga andadura profesional. José y Juan, Cruz y Raya, viven en este momento las mieles del éxito, aunque el primero reconoce que en todos los «matrimonios» existen diferencias de criterio. Más de un humorista ha reconocido el buen momento que vive el dúo, cuyo programa se ha trasladado del viernes al domingo sin perjuicio de la fidelidad de audiencia. Pero toman iniciativas por separado y José Sánchez Mota tiene también sus propios proyectos. -¿Qué originó el cambio horario a los domingos? -La entrada de Un, dos, tres..., que es un programa mucho más largo y les llenaba todo el viernes. En cierto modo era comprensible y no hubo problema, pero al principio teníamos cierta preocupación porque el público está acostumbrado al público a la tradicional hora de los viernes. -¿Volverían a aportar dinero para realizar un especial, como ocurrió en el de Nochevieja? -Si fuese necesario, sí. En Nochevieja quisimos que la tecnología estuviera al servicio del guión y no había otra manera de hacerlo, porque los medios de TVE no daban para realizar ciertos tipos de efectos que fueron hechos por una agencia que contratamos. -¿No piensan volver a utilizar a los políticos para su humor? -Por supuesto. El cómico está obligado a reflejar en parte lo que está ocurriendo, debe ser un cronista de la realidad social y cuando más hemos tocado este aspecto mejor ha sido acogido nuestro trabajo. Cada vez nos comprometemos más en ese sentido. Incluso al parodiar el telediario de Urdaci tocábamos la guerra de Irak y otros asuntos y no tuvimos ningún problema. -Da la impresión de que en están echando toda la carne en el asador, como si fuera la última etapa del dúo. -¡Que va!, ja, ja, ja. ¡Por Dios!. Vamos a seguir juntos, no entra en nuestros planes separarnos, aunque nuestra vida artística no pueda ser indefinida. Lo que sí tenemos son proyectos por separado. Tengo uno bastante firme para hacer una telecomedia. -¿Es difícil que dos personas convivan profesionalmente tanto tiempo? -Forma parte de la vida, tanto en las parejas sentimentales como en las profesionales. No es fácil aguantar tanto tiempo, porque cada cual tiene su criterio y, lógicamente se producen choques de vez en cuando. -Les compensa el esfuerzo? -Hasta ahora sí, porque nos lo pasamos bien. En el momento en que no sea así, probablemente no seguiremos. Esto lo tenemos muy claro los dos. -¿Cómo es el sentido del humor de los españoles? -A los españoles nos gusta reírnos de nuestras propias ruindades, pero vistas en otros. En España hay todavía un cierto complejo de hacer el ridículo, aunque cada vez menos. Yo recuerdo que uno de los gags que pegó fuerte fue aquel de «no es por no ir...». La gente se reía en realidad del cinismo brutal tan latino de poner excusas a lo inexcusable. Todos somos roñosos y miserables en ciertos momentos. Una España se ríe de la otra media. -¿Qué político es más interesante para imitar? -Si parodias a Bush tiene más repercusión, porque es el comisario de Estados Unidos. La parodia tiene más repercusión si es sobre alguien que está mandando, sea el que sea. -¿Qué humoristas tiene como referencia? -En España ha habido cómicos maravillosos: La Codorniz, Jardiel Poncela, Tip y Coll, Fernando Esteso y Pajares, Martes y Trece... Y compañeros nuestros actuales. Hay gente muy buena. -Cómo ve la televisión que se hace en la actualidad en España? -Yo creo que se hacía mejor televisión antes, probablemente porque no había necesidad de tener más audiencia. Yo me acuerdo que cuando era niño programaban Grandes relatos, con series maravillosas, tanto extranjeras como españolas.