Diario de León

La nueva ministra nombrará próximamente un nuevo director para el Museo Reina Sofía

Carmen Calvo afirma quesus cambios en Cultura no serán «de escaparate»

Creará un Consejo de las Artes y modificará las leyes de Mecenazgo y de Patrimonio

La nueva ministra de Cultura, durante la toma de posesión de su cargo

La nueva ministra de Cultura, durante la toma de posesión de su cargo

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Miguel Lorenci - madrid
León

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Una nueva Ley de Excepcionalidad Cultural, la modificación de las leyes de Mecenazgo, Patrimonio Histórico y Cine, la creación de un Consejo de al Artes y la designación de Francisco Rico como coordinador del cuarto centenario de la publicación de El Quijote serán algunas de las primeras actuaciones de la nueva Ministra de Cultura, Carmen Calvo, que ayer tomaba posesión de su cargo. Anunció además la ministra cambios inminentes en el Reina Sofía y más calma para el Museo del Prado, prometiendo actuar «sin prisas pero sin pausa» en una gestión que, según dijo, estará presidida «por la cautela y la prudencia». «Mis cambios no serán de escaparate; los habrá rápidos y más pausados, pero a todos les dotaremos de sentido» fue su declaración de intenciones tras la toma de posesión. En los próximos días se propone así Carmen Calvo designar a los tres directores generales sobre los que articulará la estructura de su ministerio -Bellas Artes, Libro, y Cooperación- y dejará para más adelante los cambios en el Institutito Nacional del Artes Escénicas y de la Música (INAEM) y el de la Artes Cinematográficas y Audiovisuales (ICAA). Unos cambios «que consultaré con el presidente Zapatero cuando completemos la estructura básica», según explicó la nueva ministra, aduciendo que «cuantas menos estructuras que sean más caras, mejor». Una estructura básica que comandará el ya nombrado subsecretario del ministerio, Antonio Hidalgo, que ya desempeñó esta responsabilidad en la Consejería del Cultura del Gobierno Andaluz que Calvo ocupó durante los últimos ocho años. Otra de su prioridades será la convocatoria de una reunión con todos los consejeros de Cultura de las Comunidades Autónomas. «No tardará más de cuatro o cinco semanas. Quiero ser y voy a ser la ministra de todos los consejeros y de todas las Autonomías» prometía Carmen Calvo, recordando: «He sido cocinero antes que fraile, y eso me da una visión de conjunto sobre las Comunidades Autónomas». El cine y los museos Anunciaba también la ministra modificaciones en la Ley de Cine, muy vinculados a la futura nueva Ley de Excepcionalidad Cultural según el modelo francés. «El cine es hoy el gran vehículo de valores y una gran dimensión industrial que hay que proteger con esa Ley de Excepcionalidad Cultural». «Una sociedad que no cuida a sus creadores y científicos no tiene futuro» aseguraba la nueva ministra. Respecto a posibles cambios en el museo del Prado, anunciaba «calma» la nueva ministra. «Me lo tomaré con mucha pausa, pero me daré algo más de prisa en el museo Reina Sofía» aseguraba, confirmando tácitamente la permanencia de Miguel Zugaza al frente del Prado y la salida de Juan Manuel Bonet del Reina Sofía. Cultura ética y sin discursos Carmen Calvo tomó posesión de su cargo en un acto institucional ágil y rápido, con una alocución de apenas 15 minutos para la que la ministra no se ayudó de notas ni papeles. «Venimos a crear el mejor ambiente posible para ser los mejores servidores públicos» aseguraba. «No entiendo, ni desde la política ni desde la moral que practico, el poder como algo personal, sino como un instrumento para llegar a un fin» aseguraba. «El mundo de la Cultura es el mundo de la complejidad de la subjetividad y de la libertad más rotunda», dijo. «Haré todo lo posible para que la Cultura ayude a la cohesión y a la convivencia de este país. Será Cultura con ética, con valores democráticos, para y por los valores y las necesidades y exigencias de los creadores de este país», prometió la nueva ministra.

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