Dos de Buñuel

AYER SE cumplieron 200 programas de Versión Española (La 2), que es el escaparate por excelencia del cine propio en todas las televisiones. Lo es por la sencilla razón de que las demás pasan del asunto. Eligieron con acierto el clásico de Buñuel, Viridiana , que hace casi cuatro décadas montó un pollo diplomático que finalmente le llevó a estar prohibida en los cines españoles. Intervino nada menos que el Vaticano. El tiempo puso las cosas en su sitio y la película es una joya de modernidades. De paso recuperaba la memoria de Buñuel, cada vez más relegada a los libros mientras sus películas permanecen en los archivos. Por suerte para los cinéfilos, Buñuel asoma de nuevo a La 2 aunque sea en horario un tanto cainita. A las 02.25 emiten Un perro andaluz , mítico cortometraje de 1929 con el que el maestro aragonés exponía las esencias de su genio. Es otra de esas películas más parecidas a un icono al pasear una fotografía por todas las enciclopedias cinematográficas que se precien de tales: aquella en la que una navaja corta a pelo el ojo de una mujer... Luego supimos que era el ojo de una pobre vaca, pero el horror y la grima que provocan todavía dura a quien haya tenido ocasión de ver el filme. Habrá legión de jóvenes cinéfilos que quizá no hayan disfrutado todavía de esta joya que siempre provoca inquietud. Recuperando a Buñuel.