El caso de los cuadros perdidos revela el descontrol del inventario municipal

La solicitud de la Asociación de Pintores y Escultores Ciudad de León al Ayuntamiento de la capital sobre la localización y certificación, de varios cuadros premiados en el Concurso de Pintura al Aire Libre que se celebra cada año coincidiendo con las fiestas de San Juan y San Pedro, y que deberían estar en las dependencias municipales, ha puesto de manifiesto que el Ayuntamiento no posee un inventario de los bienes artísticos que son de supropiedad y, también, que en los traslados al edificio de Ordoño II y, presuntamente, en el cambio de gobierno, se produjeron descuidos y cambios de ubicación que dificultan la localización al completo de estas obras pictóricas. El concejal de Cultura del Ayuntamiento, a pesar de que nada tiene que ver con el inventario de los bienes de la casa de la Poridad, ha realizado una investigación que se ha traducido en la localización de una parte de estos cuadros. «Las peticiones -dice Alejandro Valderas- llegaron en cinco documentos distintos, todos durante la segunda quincena del mes de enero. Y el 25 del mismo mes contesté personalmente a la asociación con una relación de un total de 13 cuadros perfectamente localizados». Sorprende que la gestión del inventario de las propiedades municipales corresponda hasta este momento a Urbanismo. También que en el Inventario de Bienes y Derechos del Ayuntamiento de León realizado el año 2001 por la empresa Amepro, no exista un apartado de bienes artísticos. Asegura Valderas: «Siendo concejal de Patrimonio en la pasada legislatura, propuse que el inventario de bienes con carácter histórico o artístico pasará a Patrimonio, pero esta petición no fue atendida y en la actualida». La Concejalía de Cultura transmitió a la asociación los resultados de sus investigaciones, aunque por problemas de correo aún no hayan llegado oficialmente a su destinatario, quien sí las ha recibido personalmente de la concejalía. «Posteriormente -asegura Valderas- han llegado nuevas peticiones, de las que ocho han sido cumplimentadas y remitidas para su contestación al funcionario encargado de la gestión del Inventario. Actualmente están en trámite, en el Servicio de Asuntos Económicos, las contestaciones a estas nuevas peticiones y pendientes, en la Secretaría General, los certificados de los 15 cuadros encontrados de la primera petición. Alejandro Valderas, en la Comisión Municipal de Educación Cultura y Patrimonio del pasado 22 de marzo, manifestaba que se había preocupado «personalmente por practicar las averiguaciones pertinentes y aportar la relación de cuadros que han sido localizados en distintas dependencias municipales, señalando que se ha encontrado con la dificultad de que ninguna oficina o empleado tiene asignado el Inventario de Bienes Artísticos». Lo que no deja de ser chocante. La investigación ha puesto de manifiesto una situación kafkiana en la farragosa maquinaria municipal. Parece increíble que una entidad oficial no tenga perfectamente documentada todas y cada una de sus pertenencias, sobre todo cuando se tratade objetos no solamente valiosos por su cotización en el mercado, sino también porque algunos tienen importante relevancia para la historia de la ciudad.