Recogida de firmas y foto de leoneses, algunas de las iniciativas

Mil ochocientos metros cuadrados de vidrio repartidos en 737 vidrieras polícromas, tres rosetones de ocho metros de diámetro, 31 ventanales de doce metros de altura y 48 huecos de tamaños variados, no pueden pasar inadvertidos. La luz interior que imprimen a la Pulchra Leonina , una luz simbólica, coloreada y cambiante, no deja indiferente a nadie. Mediante el empleo de arcos ojivales, los arquitectos góticos consiguieron disminuir las cargas de los muros, haciéndolos más luminosos y transparentes, con mayores vanos que cubrían con grandes vidrieras. Las de la catedral de León son el más bello exponente del gótico en España, país que nunca tuvo gran tradición vidriera, y pueden compararse con las de Chartres, Reims o Amiens, en Francia. Para que esta joya no se pierda, y para que el mundo tenga la posibilidad de conocer y disfrutar de una belleza como ésta, el Ayuntamiento de León puso en marcha en enero una campaña para conseguir que las vidrieras se conviertan en Patrimonio de la Humanidad. La recogida de firmas, que ya superan las 15.000, o la creación de un logotipo para promocionarlas son algunas de las iniciativas que el Ayuntamiento está llevando a cabo, además de que unos 67 organismos e instituciones se han adherido a este proyecto. El Consistorio también tiene previsto colocar carteles en varias ciudades del país como Madrid, Oviedo y Barcelona, para promocionar así el proyecto. Pero quizás la iniciativa más conocida es la gran foto de familia que se realizó el pasado día 24 de junio y en la que participaron, según fuentes de la Policía Local, unas 2.000 personas. Esta fotografía será la portada del expediente que el Ayuntamiento, con el respaldo de la Junta, enviará a la Comisión de Patrimonio del Ministerio de Cultura. La implicación, recomendable y necesaria, de todos los leoneses en este proyecto, ayudará a conseguir un objetivo que la seo de la capital merece, como monumento representativo de la ciudad, que es.