| Reportaje | Fe y picardía en el Camino |
En homenaje a Carro Celada
La editorial Lobo Sapiens rescata uno de los libros más sorprentes y más útiles para entender la esencia del Jacobeo: «Picaresca, milagrería y milandazas en la Vía Láctea»
?steban Carro Celada, ese astorgano universal, de intuición literaria admirable y de inmenso amor por su tierra, reunió en los años sesenta un extraordinario conjunto de mitologías, fábulas e impresiones en torno a aquella que fue la gran aventura del reino asturleonés: la creación del Camino de Santiago, un recorrido de estrellas en torno al cual circularía la más pintoresca, variada y colorista procesión de hombres e ideas que ha visto este pedazo del Noroeste ibérico. Así, el libro Picaresca, milagrería y milandanzas en la Vía Láctea no es sino una reedición de la misma publicación aparecida a finales de los años sesenta; un libro que se aleja de todos los tópicos y que nos sumerge de lleno en el Camino de Santiago, esa «Vía Láctea terrenal» como en su día advirtiera genialmente el director de cine Luis Buñuel. Esteban Carro Celada, su autor, bucea en diez siglos de historia del peregrinaje hacia el campus stellae , Compostela, el campo de las estrellas, pero, según asegura el editor José Antonio Martínez Reñones «no son historias manidas, de las ya contadas en otros libros o guías, sino que se trata de un libro original». La clave, la originalidad Justifica Martínez Reñones esta singularidad advirtiendo que el autor «trata de detectar la vida en todos sus sentidos: huele, palpa, oye y saborea el recorrido del Camino», y lo hace a través de la puesta en escena en el libro del tránsito jacobeo de personajes curiosos, típicos o poderosos en sus estados naturales de humanidad, nunca como nos lo transmitían sus cronistas: «Se trata de personas marginales, pícaros, gente de muy bien vivir y de muy mal pasar», puntualiza el editor. El libro no es sino para la gente que desea descubrir los secretos del Camino, para los que pretenden deleitarse con multitud de anécdotas que cada día suceden en él. El sorprendente y casi enciclopédico conocimiento que de la Vía Láctea tiene Carro Celada -de quien este año se cumple el treinta aniversario de su muerte- se manifiesta en el libro «mediante el infinito tráfico de reliquias, la gran cantidad de milagrería que arrastra el Camino, las miles de anécdotas recogidas de la Vía Láctea», según asevera Martínez Reñones, quien además señala que el libro «constituye también un pedazo de intrahistoria y una experiencia muy gratificante para aquellos que disfruten del placer de la lectura, ya que el libro huye de cualquier tipo de vulgaridad, y ahonda en curiosidades del Camino». Una gran vinculación a la Ruta Jacobea acompañó siempre a la vida de Esteban Carro Celada, lo cual le llevó a realizar el Camino al menos en una ocasión cada año. El hecho de que Astorga fuera (y sea) crisol de la mayor parte de los caminos: centro de la Vía de la Plata y del Camino Francés -juntura de estos dos travesaños que constituyen la cruz vital y la espina dorsal del reino de León- y una de las pocas diócesis apostólicas existentes, fueron otras de las razones que le llevaron en su día a escribir el libro, a pesar de que en aquellos momentos el significado del Camino era ínfimo en comparación con el actual. El porqué de la reedición del libro en este momento viene dado por tres motivos principales: «Primero porque es una joya literaria; segundo porque con él reclamamos un puesto en la literatura para Esteban Carro Celada, y tercero, porque gracias a él Astorga y Lobo Sapiens volverán a divulgarse», indica José Antonio Martínez Reñones. La ayuda de José Antonio Carro Celada, hermano del autor, ha sido fundamental a la hora de completar la tarea, «él nos ha brindado toda su generosidad para publicarlo», apunta el editor de Lobo Sapiens. Los bellos dibujos e ilustraciones que acompañan al texto han sido realizados por el emblemático artista Sendo, alguien que, según el propio Martínez: «pone su pincel al mismo nivel que las palabras de Esteban». Picaresca, Milagrería y Milandazas en la Vía Láctea se presentó el pasado 11 de agosto en la Biblioteca Municipal de Astorga con una nutridísima asistencia de público. Al acto asistieron José Antonio Carro Celada, Sendo, el alcalde de Astorga y José Antonio Martínez Reñones.