Un científico adelantado a su tiempo y una lanza en defensa de la paz

La familia Gordón ha seleccionado el texto de la losa que, entre otros datos, llevará la frase «León, ya no nos dueles». Asimismo, junto a las cenizas del veterinario y político leonés reposarán las de su muejr, Consuelo Carmona. La familia ha comunicado que un representante de la misma se trasladará desde México para asistir al acto. El Panteón de los Hombres Ilustres data de 1928 y hasta ahora no había acogido ninguna personalidad. Se trata de una obra declarada bien de interés cultural y en su interior hay una vidriera con un Pantocrator, inspirado en el que puede verse en la Colegiata de San Isidoro, con la leyenda: «Yo soy la luz del mundo». La Fundación Vela Zanetti ya había coordinado en junio de 2004 la llegada de las cenizas de Gordón, presidente del Gobierno de la República en el exilio y uno de los modernizadores de la ciencia veterinaria. Fue entonces cuando se aventaron parte de las cenizas en un bosque leonés y el resto de ellas quedaron en depósito en la Fundación a la espera de que el panteón fuera restaurado. Un gran adelantado a su tiempo, Gordón Ordás accede a la Veterinaria en un momento en el que ésta presenta un panorama deplorable. Fue él quien inició la modernización de la profesión, labor por la que fue nombrado presidente del Consejo Superior Pecuario. Su compromiso social le conduce hacia la política, ocupando cargos en miniterios y direcciones generales hasta que es nombrado presidente en el exilio. Su oposición a la violencia le hace dimitir del cargo.