Diario de León

El artista presenta un diario pictórico con alusiones a Genarín y Laciana

Arroyo colocará sus esculturas en Puerta Castillo en dos meses

Las piezas más grandes del conjunto están ya terminadas o en proceso de fundición

Genarín, según la versión de Eduardo Arroyo

Genarín, según la versión de Eduardo Arroyo

León

Creado:

Actualizado:

Genarín y Robles de Laciana son dos de las referencias leonesas que el pintor y escultor Eduardo Arroyo (Madrid, 1937) incluye en un diario pictórico titulado Un día sí y otro también, que se edita en forma de libro y desde ayer se puede contemplar en Madrid a través de una exposición. Un total de 107 obras, óleos de pequeño tamaño realizados desde diciembre del 2001, en los que el autor refleja el resultado de sus reflexiones y de una disciplina que le llevó a realizar muchos de estos cuadros en solo un día. Entre las referencias leonesas de este diario aparece San Genarín, según le denomina el artista, que destacaba ayer la gran curiosidad que le produce el personaje, al que conoce tanto a través de las noticias de prensa como de la historia escrita por Julio Llamazares. La experiencia personal la tiene pendiente, pero asegura que la realizará. En Un día sí y otro también aparecen también dos cuadros sobre la muesca de la montaña situada enfrente de la casa de Arroyo en Robles de Laciana; y una representación de un unicornio lacianiego. Son, en fin, dos años de trabajo y reflexiones, fruto de la lectura y los periódicos, que se reúnen en un libro editado por Turner y en la Galería Metta. Se trata, según explica Arroyo, de «páginas arranc adas, algo extraño en la idea de que cada cuadro al óleo sea una página, por lo que el trabajo no tiene continuidad. Lo que inspira a la pintura está vinculado a la lectura, y cada texto está ligado a su imagen, pero no se sabe cuál surge primero». Esta es la primera vez que el pintor de origen lacianiego abandona el gran formato pictórico para ejecutar una larga serie de óleos pequeños. El Premio Nacional de Artes Plásticas en 1982 se definía ayer como «un pintor que escribe», a la hora de explicar esta última serie de obras. Pintor, escultor, escritor y escenógrafo, este polifacético artista puso fin a su diario el 10 de mayo pasado con la representación de un ciclista y un texto que suponen la única referencia a la guerra de Irak. Sardinas, moscas, boxeadores, jabalíes, el rapto de Europa, retratos,... Algo más de dos años de trabajo resumidos en esta muestra. Puerta Castillo El artista se refirió también ayer, antes de la presentación de la exposición, a la colocación del conjunto escultórico que prepara para la plaza de Puerta Castillo. Arroyo destacó que antes de fin de año estarán colocadas algunas de las figuras más grandes de este conjunto, probablemente la gran mosca (actualmente en proceso de fundición), o bien el eolo o el unicornio. Estas tres piezas centrales permitirán iniciar un proceso de «amueblado» del espacio urbano, en palabras del artista, que considera que la histórica y remodelada plaza se irá poblando poco a poco con el universo de realizaciones en las que Eduardo Arroyo viene trabajando en los últimos años. La terminación de las figuras avanza «poco a poco», según destaca el autor, que explica que dos de las piezas grandes están fundiéndose en estos momentos. «El fundidor ya está metido de lleno en el proyecto, así que las figuras irán surgiendo y llenando el espacio de Puerta Obispo». La colocación de las figuras de Eduardo Arroyo en la zona de Puerta Obispo cerrará tres años de polémica, de una parte con los permisos de patrimonio para ubicar estos elementos en un entorno histórico y artístico muy concreto,; y de otra con un grupo de vecinos que ha mostrado reiteradamente su rechazo al proyecto.

tracking