Una decena de historiadores analiza la España de Don Quijote

Corrupción, convulsión política, carestía, peste, rebeliones en algún dominio del imperio y cambio permanente en la gran potencia del momento. Así era la inhóspita y variable España, conformada con luces y sombras, en la que malvivió y escribió Miguel de Cervantes. Una decena de reputados historiadores e hispanistas ha fijado su lupa historiográfica en aquella España ante el cuarto centenario de la publicación de las aventuras del ingenioso hidalgo de la Mancha en 1605. El resultado es la colección de ensayos España en tiempos del Quijote ( Taurus) que han codirigido Antonio Feros y Juan Gelabert. Su pretensión es enriquecer la lectura de la universal obra de Cervantes explicándonos en detalle la economía, la política, la sociología, la intelectualidad, el arte y las relaciones externas y militares de un imperio que empezaba a dar «sus primeras muestras de declive». «Damos al lector el patrimonio historiográfico del España de Felipe II y Felipe III con nuevas interpretaciones sobre una época compleja, en transición, y vemos cómo influyó en Cervantes», apunta Juan Gelabert, profesor de Historia en la Universidad de Cantabria y codirector de la obra. Una realidad con «inquietudes, ansiedades, temores y crisis», también con «esperanzas, reformas y diálogo» en la que el denominador común es «el cambio» a juicio de Gelabert. Una permanente transición que es también decisiva en la biografía del propio Cervantes a la que se dedica el primer ensayo de la colección.