José María Merino: «Contar es iluminar en poco espacio el misterio de la vida»

José María Merino acudió ayer al Club de Prensa de Diario de León para presentar a los lectores leoneses la última de sus obras: Cuentos de los días raros . Merino, que estuvo acompañado por los catedráticos de literatura José Enrique Martínez y Nicolás Miñambres, declaró que en este libro ha invertido todas sus destrezas como cuentista y destacó que se trata de una suerte de trampantojo -como la portada de la obra- en la que se muestran situaciones normales acechadas por lo raro. El autor de El heredero llamó la atención sobre lo sobresaliente de este género literario, hasta el punto de asegurar que el cuento fue lo que realmente dio forma al ser humano. «Somos sapiens sapiens desde el día en el que alguien explicó y se acercó al mundo a través del cuento», declaró. Para Merino, los cuentos fueron la primera sabiduría con la que contó el hombre. «Antes que la filosofía, que la ciencia, que la religión, está el cuento». A pesar de que a veces se le tache de género menor por su brevedad, Merino defendió la idea de que ésa es al mismo tiempo su grandeza y su servidumbre. Así, puso como ejemplo los cuentos de Chejov y definió la labor de cuentista como la que busca iluminar en poco espacio el misterio de la vida. Realidad y ficción El catedrático José Enrique Martínez precisó que en esta obra, Merino ha hecho relato todo su pensamiento literario. Asimismo, aseguró que el lector no se encontrará en territorio desconocido, puesto que la atmósfera no resulta extraña y algunos de los personajes, caso del profesor Couso, ya han recorrido parte de su obra. «La narrativa de Merino se resume en la consecución de vivir los sueños», destacó, para añadir además que en ella la realidad siempre resulta más desconcertante que la ficción. José Enrique Martínez terminó su interpretación de la obra «meridiana» asegurando que los sueños y los sucesos sólo existen al ser contados. «Consiguen de esta manera un perfil discernible». Por su parte, el también catedrático de Literatura, Nicolás Miñambres, comenzó su intervención dando las gracias a Merino por su defensa del profesorado. «Resulta satisfactorio que alguien como él destaque que la utilización de la literatura corresponde a un profesorado en general desorientado, al que cada vez pedimos más cosas -educación sexual, vial, antitabáquica». El profesor realizó un recorrido a través de Cuentos de los días raros mediante los temas que articulan cada una de las historias: la muerte, el amor y la literatura. Miñambres citó para el primero de los casos el cuento Rebajas , relato que enlazó con La hija del diablo , o El viaje secreto , en el que la muerte no por dejar de ser real resulta incluso más terrible. El catedrático calificó a Merino como uno de los mejores narradores de España y animó a los lectores a aventurarse en su obra. «Se caracteriza por una rígida elaboración literaria, por el uso de técnicas de vanguardia, por la mitificación de espacios por todos conocidos, por la recreación de la postguerra, por la alegoría de la informática»