Reivindicando a las mujeres reales

Los problemas de integración que padece la gente obesa, las mujeres, de toda edad y condición, y los emigrantes, sea cual sea su procedencia, confluyen en Las mujeres de verdad tienen curvas, una obra, no exenta de drama, que analiza con humor las circunstancias que conforman la vida de cinco mujeres sudamericanas empleadas en un taller de costura. Un singular microcosmos social en el que este quinteto de sufridas féminas lucha por cumplir fechas de entrega, imposibles de realizar, para conseguir que el negocio no se hunda; una ardua tarea que compaginan con una reveladora charla en la que salen a relucir maridos, amantes, hijos y proyectos de futuro. Representada por primera vez en San Francisco a principios de la década de los noventa, Las mujeres de verdad tienen curvas, un texto original de Josefina López, obtuvo popularidad internacional a raíz de la adaptación cinematográfica, de título homónimo, que dirigió la realizadora mexicana Patricia Cardoso. América Ferrera, Lupe Ontiveros, Ingrid Oliu y George López, protagonizaron una cinta que obtuvo el Audience Award y el Premio Especial del Jurado, para la interpretación de Ontiveros, en el Festival de Sundance; y el Premio de la Juventud en el Festival de San Sebastián. Este particular ejercicio de expiación por parte de un grupo de mujeres, perfectamente identificables para el público, que muestran un calvario cotidiano en el que se ponen en entredicho sus derechos básicos como ciudadanos, ha sido adaptado escénicamente por la compañía Ados Teatroa en una propuesta que esta tarde, a las 21,00 horas, llega al Auditorio Ciudad de León en una convocatoria cuyo precio único de entrada de entrada es de nueve euros. Lilliam Kouri, Edelweis Fernández, María Isabel Díaz y Yeye Báez, conforman un reparto en el que también se incluye la participación de Saskia Guanche y Sara Cozar, dos actrices que se reparten el papel de la protagonista principal; una mujer, llamada Ana, que se acaba de graduar en la escuela secundaria. Con ella están Carmen, su madre, una mujer pequeña de tamaño pero con un gran talento para el teatro; Estela, su hermana, que es la dueña del taller en el que se reúnen; Pancha, una mujer melosa en las formas pero rápida con la lengua; y Rosalí, la menos gruesa del grupo y la más dulce y fácil de llevar. En esta versión, adaptada y dirigida por Garbi Losada, se ha respetado el tono cómico de la obra incidiendo más en el aspecto social, un análisis de la penosa situación en la que viven miles de emigrantes sin papeles en todos los rincones del planeta. El ensalzamiento del físico de las mujeres reales, con las curvas que se apuntan en el título, y la increíble compenetración que surge cuando las mujeres trabajan juntas, son los ejes vertebrales de una propuesta que lanza un mensaje esperanzador. Una necesaria reflexión en unos tiempos en los que predomina el culto al cuerpo, a los físicos imposibles, y en los que la mujer se adapta a su nuevo rol social. Una labor sumamente difícil si además eres gorda, latina y sin papeles. Lugar: Auditorio Ciudad de León . Hora: a las 21.00. Entrada : 9 euros.