Graciela Montes y Ema Wolf, premio Alfaguara de novela 2005

Las escritoras argentinas Graciela Montes y Ema Wolf ganaron ayer la 8ª edición del Premio Alfaguara de Novela, dotado con 175.000 dólares (unos 135.000 euros), con su obra El turno del escriba , una novela ambientada en la Génova del siglo XIII. El jurado, que adoptó esta decisión por mayoría, estuvo presidido por José Manuel Caballero Bonald, y formado también por Juan González, Ana María Moix, Iván Thays, Manuel Rivas, Silvia Hopenhayn y el cineasta Fernando León de Aranoa. Tras hacerse público el fallo, Caballero Bonald defendió la «calidad del texto» ganador, con independencia del clima histórico en el que se desarrolla la novela. La obra ganadora «recupera realmente lo que es la absoluta capacidad artística de la novela», dijo el escritor gaditano, quien añadió que El turno del escriba tiene «un dechado de virtudes literarias». El jurado, según figura en el acta, destacó que la novela es la «recreación de una época fascinante de la humanidad, la de los descubrimientos y la atracción por lo desconocido, que trasciende el marco histórico para convertir su escritura deslumbrante en un acto de libertad». Las dos escritoras, muy conocidas en su país por ser autoras de cuentos infantiles y juveniles, explicaron que escribir con dos cerebros y a cuatro manos «ha sido una experiencia formidable por el respeto que nos tenemos». «Es una novela documentada absolutamente en su aspecto histórico hasta en los detalles más minuciosos. La parte histórica es totalmente real, y la ficción son los huecos que deja la historia», precisó Graciela Montes.