Con los escudos de dos familias Una de las más bellas de España La que más se ha modificado

Del edificio fundacional se conserva una parte importante, más amplia de lo que hasta ahora se suponía. El mecenas de esta ambiciosa reforma y ampliación fue Claudio Fernández de Quiñones, inspirado en modelos toscanos. Incluía, además de la torre actualmente conservada, otra torre gemela al norte de ella y, en medio, una línea de fachada que se anteponía a la del palacio bajomedieval, además de otro cuerpo con arquerías que se proyectaba hacia el este de la torre hoy en pie. Desde finales del siglo XVI y a raiz del entronque del linaje de Luna con los Pimentel de la Casa de Benavente, este palacio pasa a adquirir un papel secundario, dejando de ser residencia principal de los condes. La decadencia se agudiza a partir del siglo XVIII cuando se incorpora a las posesiones del linaje del marqués de Uceda y Frías, Esta tendencia desemboca a mediados del XIX en la cesión del uso al Ayuntamiento, que lo destina a Casa de Mendicidad. La fase burguesa A lo largo del XIX se emprendieron las reformas que transformaron más radicalmente la estructura y organización espacial del palacio para adecuarlo como vivienda plurifamiliar. En 1872 se modificó la antigua fachada bajomedieval adquiriendo el aspecto que hoy contemplamos; se construye una nueva caja de escalera que modifica de manera sustancial la circulación interior y muchos de los espacios originales se compartimentan con múltiples tabiques. A finales del siglo XIX se asiste a la transformación en el uso de la zona de la torre renacentista, pues desde el año 1878 se instaló aquí un salón de baile. La fase mercantil La inauguración del mercado de abastos en 1929 se convirtió en una oportunidad económica para los propietarios, que procedieron a arrendarlo en su integridad para su uso como almacén y tienda de asentedores de frutas en la planta baja, mientras que los pisos superiores se destinaban a vivienda de estos comerciantes. En consecuencia, se emprendieron nuevas reformas para adecuar los espacios a esta nueva actividad.