La compañía Shakespeare denuncia con teatro clásico la intolerancia
La prestigiosa compañía Royal Shakespeare ha programado esta temporada varias obras del teatro isabelino que parecen prefigurar a la vez que denuncian la intolerancia y xenofobia en el mundo de hoy, según sus responsables. Una de ellas es La caída de Sejanus , de Ben Jonson (1572-1637), tragedia que relata el ascenso y ocaso de un favorito sin escrúpulos en la corte del emperador romano Tiberio. Ben Jonson tuvo que comparecer en su día ante el Consejo Privado de la Corona para responder a la acusación de que su obra mostraba tendencias papistas, acaso el delito de traición más grave en la Inglaterra de entonces. La representación coincide con el cuarto centenario de la frustrada Conspiración de la Pólvora, en la que un grupo de católicos dirigido por Guy Fawkes intentó volar las Casas del Parlamento y atentar contra Jaime I. A raíz del descubrimiento de aquel complot, cualquier individuo sospechoso de mostrarse crítico con los poderes establecidos podía verse acusado de ser papista y condenado por alta traición. El director adjunto de la Royal Shakespeare, Greg Doran, traza un paralelo entre el clima anticatólico de entonces y las sospechas que rodean todo lo islámico desde los atentados del 11 de septiembre de 2001.