UPL llama a la «rebelión» de los colegios leoneses contra la Fundación Villalar

Representantes de las juventudes de la Unión del Pueblo Leonés-Conceyu Xoven, acompañados por miembros de la directiva del partido, hicieron pública ayer su denuncia y su rechazo a un nuevo plan de la Fundación Villalar por el cual esta entidad autonómica enviará «unidades didácticas» con información sobre la historia de Castilla y León a todos los centros de primaria de la comunidad. Abel Pardo, secretario general de Conceyu Xoven, manifestó la «alarma generalizada» que las iniciativas de la Fundación causan «entre el leonesismo en particular y la sociedad leonesa en general», y recordó que en esta entidad «no ha querido participar ninguna institución, partido o asociación leonesa». En referencia al envío de las unidades didácticas, Pardo argumentó que «una cosa es que se dirijan actividades hacia personas que tienen su ideología formada o jóvenes que pueden votar, y otra muy distinta dirigirla hacia niños de entre 10 y 11 años». Para Pardo, esta iniciativa es una especie de «globo sonda» del gobierno autonómico para la inclusión, durante el próximo curso escolar, de una «asignatura de exaltación del espíritu regional» que remite, según él, «a los años del franquismo más rancio». Idea «aberrante» Pardo tuvo muy duras palabras para la Fundación, cuya nueva idea tachó de «aberrante» y cuyos métodos, dijo, «recuerdan al gulag soviético». También subrayó las frecuentes denuncias y críticas vertidas por «asociaciones, instituciones y medios de comunicación leoneses» contra una entidad que tiene, como principal y declarado objetivo, «fortalecer el sentimiento de pertenencia a Castilla y León». En cuanto a las unidades didácticas, y por lo que se ha podido ver hasta ahora en los contenidos de la página, éstas no muestran en ningún momento a León como región diferenciada a lo largo de los siglos, hablando de Castilla y León como una única cosa. Las unidades no mencionan tampoco que la comunidad de Castilla y León se crea ex novo en 1983, mientras que antes siempre existieron, de forma, separada, las dos regiones. Así, las juventudes leonesistas llaman a la «rebelión» de los directores de centros, jefes de estudios y otros responsables educativos para que «rechacen» estas unidades educativas cuyo gran propósito es «enseñar a los niños que León nunca tuvo identidad propia». Sin embargo, algunas de las más encendidas críticas de Abel Pardo fueron para un «folleto», como lo llamó, o cómic para niños, que puede descargarse directamente de la página web de la entidad (www.fundacionvillalar.es), y que está protagonizado por dos personajes: el erizo Ordoño y la comadreja Juana. En ella, el rebelde Ordoño es «reeducado», según Conceyu, para que entienda y ame las Cortes de Castilla y León. Los representantes de la formación leonesista también comentaron que la Fundación «premiará» a los centros y a los escolares que mejores trabajos envíen a un concurso sobre la historia de la comunidad, hecha sobre las premisas de las citadas «unidades didácticas».