Otro muerto¿

DESDE la noche del domingo, fue imagen recurrente en la tele, más en los matinales y espacios del corazón, que en los informativos, que también. El cadáver de Rainiero de Mónaco se expone a los monegascos hasta hoy, pero también a las cámaras, que cada cosa a su tiempo y no quedaba bien mostrarlo contra el protagonismo mediático de Juan Pablo II, pese a palmar el príncipe varios días atrás. Algo anda al revés cuando no importa reservar a un muerto, para su exposición pública. Digan lo que quieran, pero hay algo de macabro y de impudicia en esa manía de ponerles en un escaparate cuando son lustrosos y toman a las cámaras como apéndices útiles para convertir el óbito en un espectáculo. Todavía con la retina atiborrada de imágenes vaticanas, en el Principado no iban a ser menos. Tendrán a Rainiero en un ataúd hasta sus exequias del viernes. ¡6 días! Los informativos dominicales lo mostraron con la declaración oficial del heredero al país. Lo sepultarán junto a su esposa Grace Kelly, aquella glamorosa actriz que sería un revulsivo turístico para la economía de un micropaís ahora bajo sospecha por incómodas cuestiones fiscales. Semana de suerte para los formatos del cuore, empleados en despellejar a una familia con mucha tela que cortar. Por unas horas, los mindundis vivedelcuento pasarán a un olvido del que nunca debieran haber salido. Natural, hay un muerto en Mónaco¿