El Auditorio recibe a «Julio César» y a la diva María Bayo esta semana

La semana musical se inicia a ritmos del mandinga y de los tambores. Sonidos de África que llegan de la mano del que está considerado el mejor «djembefola» del mundo. El gran percusionista Mamady Keïta, acompañado por su grupo Sewa Kan, inicia mañana en León su gira europea. El concierto tendrá lugar en el Teatro Emperador. Esta será, sin duda, una de las últimas ocasiones de ver al artista sobre un escenario, porque Keïta ha anunciado ya su decisión de retirarse. El concierto de mañana, en colaboración con las ong Sed y Entreculturas, tiene además un toque benéfico, ya que servirá para recaudar fondos para la construcción de una escuela en Zambia. Tras la actuación del músico guineano, el viernes el Auditorio recibirá a una de las grandes voces de la lírica actual. La soprano María Bayo, una de las mejores y más reconocidas intérpretes mozartianas, admirada en los más grandes templos de la lírica, recala en León para ofrecer un completo recital en el que, acompañada por el pianista Fabrice Boulanger, hará un recorrido por obras de Martín y Soler, Rodríguez de Hita, Mozart, Granados, Esplá y Montsalvatge. Bayo es, sin duda, una de las grandes estrellas de la programación lírica del Auditorio para esta temporada. Acerca de su faceta como intérprete de recitales, la soprano navarra ha manifestado en alguna ocasión que se trata de «un género muy difícil, más que la ópera, porque te encuentras más sola delante de un público con el que tienes que tener un contacto». Desde sus comienzos, Bayo ha incluido siempre en su repertorio temas de autores españoles. «Porque soy española, me gusta cantar en mi idioma y quiero cultivarlo, aunque inevitablemente el francés, el alemán y el italiano están necesariamente en mis actuaciones». Y en esto llegó Julio César Shakespeare escribió Julio César basándose en los textos de Plutarco, pero nadie como el gran autor inglés ha sabido retratar la condición humana. Dos personajes tan diferentes como Bruto y Casio, movidos por intenciones quizás contradictorias, llegan a creer que el único camino es asesinar a César. La compañía catalana Teatre Lliure recupera una obra intemporal y, bajo la dirección y adaptación de Álex Rigola, presenta un clásico completamente renovado, hasta tal punto que en la que actualiza la obra hasta tal punto que los personajes sustituyen las togas por el esmoquin. Teatre Lliure nuevamente vuelve a apostar por el teatro de texto, con la relectura de los clásicos y el compromiso con la creación contemporánea. Rigola ha incorporado en este nuevo Shakespeare el movimiento y la danza, pero con una gran economía escenográfica: los más de 40 personajes de la obra original han quedado reducidos a doce.