Diario de León

Y sólo quedan dos...

Con el cierre de los Kubrick, León mantiene sólo los Van Gogh y Cinebox, a la espera de saber el destino que aguarda al Emperador

León

Creado:

Actualizado:

El Pasaje fue el último. Ahora le ha tocado el turno al Kubrick, heredero del mítico Lemy de los años cuarenta, que hace apenas dos décadas se sumaba a la creciente moda de los «minicines». Pero la sangría comenzó mucho antes. León ha ido perdiendo salas de cine hasta quedarse únicamente con los Van Gogh y los recientes Cinebox. Queda en el aire el futuro del Emperador, cuyos propietarios llevan años negociando su venta con el Ayuntamiento, con el fin de reservarlo exclusivamente para teatro. León se ha convertido en una de las capitales con menor número de salas de proyección. En los sesenta la ciudad llegó a tener una decena de cines. Un esplendor que nunca volvió a recuperar. Una a una, las antiguas salas fueron cerrando para albergar un bingo (Condado), un área de juegos infantiles (Trianón) o un supermercado (Pasaje). El Emperador es ya el único superviviente de una era dorada del cine en león. De momento nada se sabe de otros proyectos cinematográficos, como el que se creará en la nueva estación de tren que se construirá detrás del edificio de los Juzgados, en una superficie superior a los 50.000 metros cuadrados, donde están previstos unos multinicines. Vialia-Estación, como se denomina a este complejo, que construirá una sociedad participada por Rente, no tiene aún una fecha clara de apertura. También la empresa Elde tenía previsto abrir unos minicines en Santa Nonia; un proyecto condicionado a la compra del Emperador por el Ayuntamiento y a un complicado canje de parcelas con la Diputación.

tracking