Hombres G y El Canto del Loco le ponen el broche de oro a las fiestas

A los acordes de Insoportable, una de las canciones más populares de El Canto del Loco, que en esta ocasión interpretaban Hombres G, dio comienzo anoche uno de los conciertos del año. Más de 9.000 espectadores abarrotaban la Plaza de Toros, provocando el consiguiente colapso circulatorio en las inmediaciones, para asistir al concierto con el que ambos grupos cerraban el programa festivo. Una vibrante celebración musical en la que la gente bailó y coreó un repertorio en el que se mezclaban sabiamente temas de ambos grupos. Temas propios y ajenos Cantaron sus propias canciones, las de los otros, las nuevas y las viejas, juntos y por separado. Dani Martín (voz), Chema Ruiz (bajo), David Otero (guitarras) y Jandro Velázquez (batería), componentes de El Canto del Loco, y David Summers (voz y bajo), Daniel Mezquita (guitarra), Javier Molina (batería) y Rafa Gutiérrez, integrantes de la banda Hombres G, compartieron escenario, durante algo más de dos horas de completa complicidad, entre ellos y con el público, en una convocatoria que reunía el pasado y el presente del pop español. Canciones ya conocidas como La madre de José o Ya nada volverá a ser como antes, nuevas como Úsanos, Pescao, Tal como eres o Despiértame, que integran Zapatillas, el nuevo álbum del grupo de Dani Martín, y los éxitos de la formación liderada por David Summers, como Venezia, Marta tiene un marcapasos, El ataque de las chicas cocodrilo, Suéltate el pelo, Voy a pasármelo bien o Sufre mamón, le dieron forma a un concierto que se repetirá pasado mañana en el estadio Vicente Calderón. La buena forma de una de las bandas con más proyección del panorama actual, y el dominio escénico de un grupo que está protagonizando una gloriosa y merecida resurrección mediática y musical, marcaron una apabullante propuesta sonora que convenció al público desde los primeros compases. Pocas veces se ha visto tanta compenetración entre músicos y público como en este auténtico broche de oro festivo de. un San Juan y San Pedro que ha sido el más largo en la historia por el número de días programados de festejos.