Emma

EMMA GARCÍA es una presentadora que se hace querer. Habla con pasmosa naturalidad ante la cámara y mantiene la frialdad hasta en los momentos más tensos. Tiene una mirada dulce, pero a la vez es directa y sin duda su sonrisa derrocha telegenia. Todo perfecto. O casi. Porque a Emma le ha tocado un papelito que nadie con el título de periodista bajo el brazo soñaría. Uno, cuando está matriculado en la facultad, puede soñar con dormitar en un gabinete de prensa tranquilo, con ir a Bosnia a ver pegar tiros (Emma, precisamente, estuvo allí), con obtener el Pulitzer o con marcar un hito en la televisión más ácida e inteligente. Lo que no creo es que ningún joven que estudie periodismo sueñe con escuchar en un plató las vergüenzas de Pepe, un señor que es padre de Elena, una chica que acudió a La casa de tu vida . Ayer el padre, la hija y el cuñado dieron un espectáculo que ya no sorprende en A tu lado , porque justo cuando terminó este culebrón entró en el plató Fresita, aquella del flower power catódico, para decir que Nico, su amiguito en GH , le tenía envidia. Pobre Emma, seguro que está encantada con lo que cobra, la fama que tiene y el carrerón que lleva. Pero el tiempo pasa y cuando tenga más arrugas que mechas, el monstruo que la alimentó se la tragará y entonces ella se dará cuenta de que había mil maneras de ser periodista. Pero esa no.