Han elegido un programa muy arriesgado, con obras de Mozart, Brahms y Rachmaninov
La orquesta de Bari pone fin al curso de Achúcarro y Aprea con un concierto
La sinfónica italiana contará esta noche en el Auditorio con cuatro directores y tres pianistas
El Allegro del Concierto para piano y orquesta Kv 491, de Mozart, dirigido por Silvia Patricelli con Eloisa de Guzmán Alonso al piano; el Concierto para piano y Orquesta en Si Bemol Mayor Op. 83, nº2, de Brahms, con Luis Gustavo Carvalho como solista y Mathieu Mantanus, en el podio; y el Concierto para piano en Do Menor Op.18, nº 2, de Rachmaninov, dirigido por Francisco Valero (1 movimiento), Francisco Ivan Ciampa (2º y 3 movimiento) y Josu de Solaun Soto, al piano, son, junto a la Orquesta Sinfónica de Bari, los intérpretes que esta noche, a partir de las 20.30 horas, cerrarán la segunda edición del Curso para jóvenes pianistas y directores de orquesta que desde el pasado día 4 viene celebrándose en León. El último concierto de los dos programados para clausurar este segundo curso concita, al igual que el celebrado ayer, entre sus intérpretes, a varios alumnos que son ya auténticos virtuosos en el apartado pianístico, con obras en sus repertorios que causan admiración a sus maestros por las dificultades que presentan y que ellos resuelven con la facilidad de los elegidos. En la especialidad de la dirección de orquesta, los alumnos que esta noche subirán al podio para conducir a la Orquesta Sinfónica de Bari en algunos de los conciertos más emblemáticos y dificultosos de todo el repertorio pianístico clásico. Durante esta semana estos directores han estado perfeccionando con el maestro romano Bruno Aprea para lograr ese grado de perfección que les permita enfrentarse a la orquesta junto con el solista y buscar el equilibrio y el empaste necesarios para que todo llegue a buen puerto sin altibajos, ni sobresaltos espectaculares. Mejor cada año Joaquín Achucarro ha sido el maestro que diariamente ha estado trabajando, junto a Aprea, diez horas diarias para hacer que los jóvenes pianistas perfeccionen sus técnicas, conozcan al detalle los recursos del piano y su colaboración con la orquesta y, en definitiva puedan sacar adelante cualquier concierto por duro que este sea con la preparación, el esfuerzo y lo aprendido aquí. «Pienso -apuntaba Joaquín Achú-carro-, que este curso no sólo es de un nivel superior al anterior, sino que la gente viene con un entusiasmo y unas ganas de trabajar locas. He descubierto verdaderos talentos entre tanto joven y creo que son ya auténticos virtuosos algunos de ellos. Es un placer trabajar así, teniendo al lado además a una persona como Bruno Aprea que conoce a la perfección cada recurso de la orquesta, y sabe como debe indicar al director lo que en un momento determinado tiene que hacer para que no exista ese desequilibrio que a veces se produce cuando tocamos acompañados». Añadió Achúcarro que «el curso ha sido un éxito y eso lo vamos a poder ver muy pronto». Lugar: Auditorio Ciudad de León. Hora: 20.30. Entradas: 6 euros.