El convento de San Agustín abrirá en el 2007 como Museo Etnográfico

El presidente de la Diputación Provincial, Javier García-Prieto, presentó ayer en la Casa de Cultura de Mansilla de las Mulas el proyecto del Museo Etnográfico de León -que supondrá una inversión de cinco millones de euros- a todos los ciudadanos de la localidad que acudieron al evento. En el acto, donde también se encontraban la alcaldesa de la localidad, Mari Paz Díaz, el presidente y director general de Caja España, Victoriano González, el arquitecto provincial, Pablo Vicente y el técnico de patrimonio del Instituto Leonés de Cultura, Jesús Celis, se mostró un video interactivo en el se podían ver todas las instalaciones y salas del futuro museo. García-Prieto describió esta iniciativa como «una de las más importantes que se han diseñado desde la Diputación Provincial» y calificó el patrimonio cultural leonés como uno «de los más importantes de España e incluso de Europa». Por su parte, Victoriano González, reafirmó el compromiso de Caja España con la provincia de León y dijo que contribuir con esta obra, «es una manera de devolver a la sociedad los beneficios que obtenemos gracias a la obra social, en este caso por la cultura y ese museo etnográfico que sabemos, va a ser un éxito». La nueva construcción, diseñada por el arquitecto Mariano Sainz de Miera, respeta, según explicaba ayer el arquitecto Pablo Vicente, «los elementos significativos de los restos del convento de San Agustín, adaptándose a los mismos». Asimismo, añadía: «las instalaciones podrán albergar todos los fondos etnográficos de la provincia ya que tiene unos espacios muy claros y además muy dinámicos para adaptarse a las necesidades de las exposiciones temporales». En estos momentos, el museo cuenta con 3.500 piezas -1.500 para la exposición permanente-, que por ahora seguirán almacenadas en los sótanos del Edificio Fierro. La presentación, ha sido el pistoletazo de salida de una iniciativa que según palabras de Jesús Celis, «era una asignatura pendiente en la provincia». LA INVERSIÓN millones de euros Esta cantidad comprende tanto las obras de restauración del edificio como el proyecto museográfico. La Diputación adjudicó las obras de reforma del edificio a la empresa Imaga Proyectos y Construcciones, por importe de 3,6 millones de euros. LAS OBRAS número de piezas De ellas, 1.500 se exhibirán de forma permanente al público. El resto, se utilizarán en exposiciones temporales. El edificio contará con diecisiete salas; seguramente, una de ellas se dedicará íntegramente a la etnografía del Camino de Santiago. EL ESPACIO metros cuadrados 4.400 Este espacio está dividido en cuatro plantas: sótano (600 metros), baja (1.700 metros), primera (1.100 metros) y segunda (1.000 metros). LOS PLAZOS duración de las obras en meses 15 Está previsto abrir el museo al público a finales del año 2007. Desde hace años las piezas del Museo Etnográfico se encuentran amontonadas por falta de espacio en los sótanos del Edificio Fierro, sede del Instituto Leonés de Cultura. En un primer momento, se pensó habilitar el citado museo en el cercano palacete de Independencia, que finalmente se destinará a albergar la colección de pintura de Díaz-Caneja y a pintores leoneses contemporáneos. El montaje museográfico En fase ya de la construcción del nuevo edificio, se procederá a la aprobación del proyecto museológico y a la contratación del montaje museográfico o instalación de las colecciones en los espacios diseñados a tal fin. El museo dispondrá también de zonas de recepción, tienda, salas de exposición temporal, auditorio, salas de exposición permanente, biblioteca, archivo, servicios de dirección y administrativos, sala de restauración y almacenaje, etcétera. Además, el montaje dispondrá de instalaciones para audiovisuales y servicios interactivos. Áreas temáticas El museo, que cuenta en estos momentos con 3.500 piezas, las dividirá en diecisiete áreas temáticas. Así, se tratarán temas como la diversidad de los paisajes de la provincia, la arquitectura tradicional de León, el entorno doméstico, los medios de explotación agrícola y ganadera que utilizaban nuestros antepasados, el transporte, tanto en lo que se refiere al campo como al transporte de mercancías y viajeros, los oficios y la artesanía, la indumentaria tradicional y la joyería. Además, se tratarán otros temas relacionados con la organización social, como por ejemplo, las costumbres, las creencias y ritos o incluso la salud y los juegos. Por último y como tema estrella del museo, se hará hincapié en las particularidades de Mansilla de las Mulas y su ubicación. De este modo, podría habilitarse una sección sobre la etnografía en el Camino de Santiago, «que acogiese en devenir del Camino como vehículo y aposento de elementos de cultura tradicional generados en el propio Camino». Objetivos y funciones La conservación de la piezas que integran las colecciones, la adquisición de bienes materiales o inmateriales en cualquier formato y la creación de fondos documentales son algunos de los objetivos que se plantean para el centro. Además, se pretende que el museo, coordine, asesore, apoye a los museos etnográficos de la provincia y que sirva de interlocutor de la red provincial con la Administración Autonómica. La pretensión es crear un museo didáctico y de entretenimiento, algo que se verá en la forma de presentar al público los contenidos exhibidos. Impulsar y promover los estudios y el conocimiento del patrimonio etnográfico es otra de las funciones del museo. El convento de San Agustín fue fundado en el año 1500 por el almirante de Castilla, don Fabrique Enríquez. Hoy día, de el edificio inicial, tan sólo se conserva la portada renacentista y la capilla de la iglesia, pero aún así y a pesar de que el edificio este prácticamente derruido, ha sido el salvador del futuro Museo Etnográfico Provincial que ha estado condenado durante años a los sótanos del Edificio Fierro. El núcleo inicial de lo que hoy es el museo, fue una donación, en 1966, del médico maragato Julio Carro Carro. Luego, las cesiones y adquisiciones posteriores irían incrementando los fondos en cantidad y calidad. Pero, esto es tan sólo un pequeño fragmento de lo que ahora es la historia del convento y más tarde será la historia del museo, ya que, posteriormente a la destrucción del monasterio, la Capilla de los Villafañe, que hoy día todavía se conserva, se reutilizó como oficina del matadero municipal. Además, y por si fuera poco, más adelante, en la fachada y la capilla de los Villafañe se construyó el antiguo frontón de pelota por lo que se revocaron las paredes de cemento. Sin duda, esta es la historia de un edificio que constituye «una pieza etnográfica en si misma», según palabras del arquitecto Jesús Celis.