La mística de la Cabala

Moisés de León creía que el origen de la Cábala era intentar razonar y descubrir el esquema oculto del universo. La Cábala engloba una serie de teorías que asignan valor numérico a las palabras, de ahí que las ideas cabalísticas comiencen a surgir con las primeras gramáticas. Con el Zohar, Moisés de León realiza un juego de imágenes a partir del árbol de la vida, trasunto de una estructura con distintas emanaciones de luz, cada una de las cuales representaba otra virtud divina, y que englobaba la totalidad de Dios. Para el judío leonés, este árbol representaba la estructura latente del universo y por lo tanto la de cada ser humano. El veía el universo como macrocosmos, y a cada ser humano como un microcosmos del universo. Libro central de la corriente cabalística, está comprendido por exégesis bíblicos, organizados según la porción semanal de lectura de la Torá. El Zohar ha sido llamado con justicia la «Biblia» de los cabalistas. Su porción principal adopta la forma de un comentario sobre el Pentateuco de acuerdo a su división más moderna en cincuenta y dos lecciones semanales. Su título Zohar (luz, resplandor) proviene de las palabras del Génesis («Que haya luz») con las cuales comienza.