Cerrar

A punto de estrenar en el cine «Angosto», prepara una versión teatral de «Antonio y Cleopatra»

Carmelo Gómez: «Para este oficio, León no ofrece ninguna posibilidad»

El actor triunfa ante su público durante dos noches representando «La cena»

Publicado por
Ricardo Suárez - león
León

Creado:

Actualizado:

Ha sido profeta en su tierra, una vez más, con La cena , la obra de Brisville en la que comparte protagonismo con Josep María Flotats. El Emperador ha registrado un lleno absoluto con una propuesta que supone el regreso a las tablas del actor leonés tras una ausencia de varios años. «Supone la confirmación, que yo me había negado a mí mismo, de que tengo talento suficiente para poder subirme a un escenario porque tengo cualidades para ello. Me siento cómodo, confortado y reafirmado, esa es la gran lección de esta función. También tiene que ver con un texto que te guste y con un buen director, en este caso José María (Flotats)». En La cena , Carmelo Gómez da vida a Fouché, un sanguinario policía que remueve conciencias dinamitando cualquier consideración moral. «Muchas veces me pregunto, ¿por qué no seré un poco más zorro, un poco más cabrón, menos noble..?, la conclusión a la que llegas es porque no quieres. El personaje está muy lejos de mí pero un actor tiene que hacerlo todo, la mejor forma de odiar a un tipo despreciable es ser capaz de imitarlo, porque de alguna manera es ponerlo en solfa. Si consigues que el público lo llegue a odiar has conseguido lo que necesitabas, reafirmarte con él, o contra él». Un ejercicio interpretativo que ha tenido como testigo al pueblo que le vio nacer. «Supone una gran dificultad, a la vez que un placer, actuar para mi gente. Me siento muy observado y se me mide con un rasero muchísimo más fino porque soy de aquí y lo tengo que hacer bien para mis paisanos». Una tierra que tuvo que abandonar cuando decidió cambiar los aperos de labranza por el mundo de la interpretación, «me marché muy oportunamente de aquí. Para este oficio León no ofrece ninguna posibilidad, aquí no hay nada que hacer, los sueños te pasan por encima y las ilusiones es como ponerle puertas al campo porque no te queda ninguna posibilidad». Premios manipulados Lo acertado de su decisión se traduce en un espectacular palmarés de premios entre los que se encuentran el Goya, el Ondas, el Fotogramas de Plata, el de la Unión de Actores y, sobre todos ellos, el Premio Nacional de Cinematografía. «Hay premios sinceros y otros que no lo son, como las personas. La mayoría de las veces están manipulados, sobre todo los premios en los que votan muchos; hay gente con más don de gentes, con más amigos, que caen mejor, productoras más poderosas, líneas de moda, estados de opinión..., los premios no son ajenos a eso y es injusto para mucha gente que se queda fuera año tras año». Idéntico escepticismo muestra con la televisión, un medio que le otorgó popularidad masiva, gracias a su participación en la serie La Regenta , en el que no parece que le vayamos a ver en un futuro inmediato. «El producto que ofrece la televisión dista mucho de ser un producto artístico, a mí me ha costado mucho trabajo llegar a este oficio y no voy cambiar las razones en beneficio un coche o una casa mejor. Voy viviendo bien, quiero hacer lo que hago incluso sabiendo que es el camino más difícil, pero el más gratificante. Es como el teatro, uno sabe dónde se mete, cobras menos y no eres tan popular, pero es lo que más te satisface, es una cuestión romántica pero de supervivencia a la vez». Cine y teatro en proyecto Aunque sigue haciendo cine, lo próximo que se estrenará será Angosto , de Jorge Sánchez Cabezudo, «un thriller rural, no paleto, que siempre que se dice rural parece que tienen que estar todos con la pana», en la que hace de espeleólogo, Carmelo prepara una versión del Antonio y Cleopatra , de Shakespeare, con Blanca Portillo. «He roto con el miedo que me hacía repeler el teatro».