La asociación Alefh es la impulsora de una idea que aúna diversión y divulgación del patrimonio
El Consistorio reta a los alumnos de León a descubrir la «ciudad oculta»
Los colegios reciben 10.000 copias de un juego que pone a prueba la agudeza visual de los jóvenes
¿Se han fijado alguna vez en una cabeza con tres caras que vigila la ciudad desde la portada Sur de la Catedral leonesa? ¿Y en una paisana vieja que esboza una mueca desde una de las torres? Todavía más leonesamente: ¿Un músico que toca el rabel dentro de la Real Colegiata de San Isidoro? ¿Dos mozos que se agarran como en los aluches en otro de sus capiteles? Detalles como éstos, curiosos y sugerentes, se agazapan a cientos en el rico patrimonio de la antigua urbe regia . Y enlazando algunos de los más peculiares -en concreto los que salen al paso del Camino de Santiago en la ciudad- se ha confeccionado la primera ruta del León oculto , una idea de la asociación Alefh y la Concejalía de Patrimonio encaminada a que los más jóvenes se adentren en el conocimiento del León monumental. Se trata de un juego confeccionado en un formato muy manejable (y portátil) dirigido especialmente a niños de entre 10 y 11 años y que del que se repartirán unas 10.000 copias entre todos los colegios leoneses. Precisamente ayer el concejal del área, Jesús María Cantalapiedra, se reunía con algunos directores de estos centros para comentarles y proponerles la idea. A todos les pareció excelente, sobre todo por lo que tiene de «incentivo» para los chavales: gracias al juego, éstos deberán internarse en el patrimonio monumental de la capital, seguir las pistas y «descubrir» los personajes indicados. Una especie de «juego de la oca» en una ciudad que dispone de muchas «ranas» como la de la Universidad de Salamanca, a las que se podría sacar el mismo rédito turístico. También para los turistas Porque la idea lanzada por la Asociación Leonesa para el Fomento de los Estudios Históricos (Alefh) y recogida por el Ayuntamiento, parece tan buena que ya se planea editar nuevos juegos pensados para el peregrino o el turista. Por el momento, a los alumnos que encuentren todos los enigmas propuestos se les podría recompensar con un viaje a Compostela, ya que esta edición del juego está dedicada al Camino. Otras posteriores lo podrían estar, según los planes, al León romano o el judío. Además de original, la idea es barata, ya que hacer las copias de este juego sólo le ha supuesto al Ayuntamiento un desembolso de 3.000 euros.