El Lama de las letras leonesas
Discípulos del fundador de «Espadaña» intervienen hoy en una mesa redonda dentro de los actos del centenario del nacimiento del que fue director del Diario de León
«Un curilla que consiguió dominar tan certeramente los textos oficiales y oficiosos como no se conocía en todo el viejo reino intelectual». Así ha definido el veterano poeta leonés Victoriano Crémer a Antonio González de Lama, con quien fundó la revista Espadaña (1944-1951), la primera revista de poesía y crítica literaria de la posguerra española. Aquel cura de Valderas de sotana raída, que fue director del Diario de León en los difíciles años de la contienda civil, iluminó, en el claroscuro de la Biblioteca Sierra Pambley, a decenas de jóvenes con inquietudes literarias. Eugenio de Nora, Félix Pacho Reyero, Bernardino M. Hernando y José Antonio Llamas son algunos de sus discipículos, que hoy, con motivo del centenario del nacimiento de González de Lama y dentro de los actos previos al fallo del premio de poesía que lleva su nombre, intervendrán en una mesa redonda en la Sala Región. Evocando al marqués de Bradomín, Crémer ha descrito a González de Lama como «un hombre bajito, feo y sentimental, además de discreto y sabedor de muchas más cosas de que las que le habían enseñado los maestros de Valderas». Una persona que dejó su huella en algunos de los más importantes escritores leoneses, como Antonio Gamoneda, Antonio Pereira, Luis Mateo Díez, Agustín, José María Merino, Juan Pedro Aparicio o Jesús Torbado. El crítico literario de Diario de León Nicolás Miñambres, a propósito de González de Lama ha escrito que «parece imposible que un sacerdote, formado en un seminario de provincias, que ejerce su actividad pastoral en pueblos de mínimo renombre y en algún barrio de poca entidad en León, consiga una cultura de la categoría y profundidad de la que gozó este hombre y a la vez sea capaz de hacerla compatible con la filantropía y la entrega con la que él supo proyectarla entre los jóvenes que frecuentaban la Biblioteca Azcárate». Espadaña, una publicación que marcó sin duda a la generación de la postguerra, a lo largo de 48 números examinó la obra de García Lorca y Miguel Hernández y no se olvidó de exiliados como Luis Cernuda, Jorge Guillén y Pedro Salinas. La revista también dio cabida a creadores como Pablo Neruda y César Vallejo y sirvió de cauce expresivo a la primera promoción poética de la posguerra, Gabriel Celaya, Carlos Bousoño y Blas de Otero, entre otros. Lugar: Sala Región (Instituto Leonés de Cultura). Hora: 20.00. Entrada libre.