Villaquilambre denuncia que la villa romana está en peligro de desaparición

La humedad amenaza con devorar uno de los yacimientos arqueológicos más antiguos de España. La villa romana de Navatejera, descubierta en 1885, podría desaparecer si no se actúa a tiempo. Las lluvias, que resultaron providenciales para localizar la que fuera residencia de un notable romano vinculado al campamento de la Legio VII, la convierten ahora en una auténtica piscina, poniendo en grave riesgo los mosaicos y muros. El alcalde de Villaquilambre, Miguel Hidalgo, reclama la intervención urgente de la Junta y del Ministerio de Cultura -propietario de este enclave romano-, para que pongan en marcha el plan de musealización pendiente desde hace más de una década, y proteger así unos restos que, paradójicamente, son Monumento Histórico-Artístico Nacional desde 1931. Hidalgo ha hecho números y ha puesto la fecha del 2007 para la ejecución de un proyecto en cuatro fases. La primera intervención, destinada a frenar las humedades y restaurar el edificio construido para proteger los restos a finales del XIX por el arquitecto de la Catedral, Demetrio de los Ríos, necesita una inversión de 33.440 euros. Apenas una mínima parte del yacimiento, de unos 4.000 metros cuadrados, está a cubierto. El alcalde pretende reabrir las excavaciones, ya que hay indicios de la existencia de una necrópolis y de una zona de culto. La villa, fechada en el siglo IV, aunque con vestigos del siglo II, tiene dos zonas diferenciadas: la residencial, tapizada de mosaicos; y la rústica o agropecuaria. Una tercera parte es de uso dudoso, probablemente de culto y época paleocristiana. En total, el presupuesto ascendería a unos 400.000 euros, incluyendo la intervención de los arqueólogos, la consolidación de los restos y su musealización. «Hace diez años se elaboró un proyecto arquitectónico que contenía actuaciones calificadas de absoluta urgencia para la supervivencia del yacimiento, sin que se haya hecho nada hasta ahora». Hidalgo, que anunció que el Ayuntamiento está dispuesto a apoyar estas obras dentro de sus posibilidades, declaró que la villa romana será, en adelante, «el símbolo que identifique al municipio y objetivo primordial de nuestra política». Aseguró que cuenta con el respaldo del alcalde de León, Mario Amilivia, para incluir esta villa dentro de la ruta romana que la capital leonesa promociona como Patrimonio de la Humanidad. «La villa ha estado unida a la antigua ciudad romana de León desde el principio y debe seguir estándolo», dijo. Además de los mosaicos, en la villa, adscrita desde 1992 al Museo de León, se encontraron piezas de gran valor, como una estatua de mujer semidesnuda.