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Publicado por
MIGUEL ANXO FERNÁNDEZ
León

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ES TRADICIÓN el anuncio navideño de Freixenet, que siempre marcó la diferencia sobre el resto de promocionales, entre otras cosas porque fue el primero (y se confirma el más antiguo), que el de la Lotería llegaría mucho después. Este año eligieron a Demi Moore (la guapa) y Gabino Diego (el feo), y de nuevo aciertan. Ella prepara sofisticados planos, mientras él sueña¿ Y las burbujas, claro. Un spot narrativo, la modalidad publicitaria más costosa y elaborada, que en el caso de Freixenet no sólo gastan su pasta en traer a la ex de Bruce Willis, también queman en efectos especiales y en su tono de sofisticada «alta comedia». El de este año llega acompañado con un morbo extra que la marca no buscó, sin duda. Es la campaña que contra el cava, y en general los productos catalanes, promueve una parte de la España negra, también llamada profunda o si se quiere, algo así como del Mid West norteamericano. En nombre de una determinada opción político-mediática, se empeñan en que no consumamos «made in Catalunya» por su sabor a Estatut¿ Qué barbaridad. Menos mal que la guapa Moore y el feo Diego, nos invitan con una sonrisa a que brindemos con cava y que las burbujas induzcan a la cordura en la gente avinagrada. Que Baco les ilumine¿ Freixenet no faltó a su cita. Con la altura esperada.