León sigue a la espera del ADN de los 93 cuerpos del Panteón Real

Nueve años después de que una treintena de científicos profanaran las tumbas del Panteón Real para averiguar la identidad de los 93 cuerpos allí enterrados, lejos de aportar pistas que esclarezcan un secreto de siglos, la directora del proyecto, la antopóloga leonesa Encina Prada sigue sin aportar los resultados. La Junta de Castilla y Leon y el Ayuntamiento de esta ciudad, que pagaron aquella investigación, no han recibido ninguna conclusión. Las expectativas creadas en 1997, cuando los expertos vaticinaron que no sólo descifrarían el sexo, sino también las enfermedades y la identidad de los 93 personajes que yacían revueltos desde que sus ferétros fueron saqueados por las tropas napoleónicas, se han desinflado. En el 2001 el alcalde Mario Amilivia prometía celebrar un congreso con los resultados de los investigadores, forzado por la intención del radiólogo José Alfredo Piera de mostrar sus descubrimientos en una exposición en Valencia. Prometió destinar a este fin 168.000 euros. Pero los preparativos se suspendieron sin explicaciones. Este caso está lleno de misterios. Una de las primera sopresas fue el elevado número de cuerpos enterrados en San Isidoro, muchos más de los documentados.