Milene Domingues: «Mi sueño es presentar un programa para niños»

Milene Domingues no quiere ser la reina de la pista, se conforma «con bailar bien y no caerme de los tacones» cada lunes por la noche cuando aparece en el conocido concurso de TVE-1 ¡Mira quien baila! Pero, baile bien o mal, la futbolista brasileña encandila al personal con su sonrisa y su aspecto de niña buena. La ex mujer del futbolista Ronaldo asegura sentir cada lunes «el peso de la responsabilidad». «Me gusta mucho bailar, pero no es lo mismo hacerlo en una discoteca que en un programa de televisión, donde te ve tanta gente. Soy tímida y el espacio me ha servido para quitarme un poco la vergüenza, aunque esos segundos antes de salir a bailar me siguen pareciendo eternos», confiesa Domingues. Cuando tiene el balón en los pies, Milene Dominguez, a la que no le gusta nada el apodo de Ronaldinha , es un as, «pero en televisión, lo que me gusta del programa es que es una combinación de cosas porque lo paso muy bien, he conocido a personas estupendas, muy agradables, y el ganador elige la ONG a la que quiere donar dinero». «Esta parte de la fama sí me gusta porque podemos ayudar a la gente, lanzar mensajes y tener una influencia para las causas justas». Poco a poco Domigues se ha hecho un hueco por sus méritos deportivos y está más allá de haber sido la mujer y madre del único hijo de Ronaldo. De la que es su primera experiencia televisiva en nuestro país, esta joven de 26 años dice que «para bien o para mal la tele tiene mucho poder». «Todos los que estamos aquí tenemos nuestro trabajo, uno es humorista, otra cantante.... En la tele sólo había sido comentarista de fútbol, primero en Italia y luego aquí en Fútbol es fútbol (Telemadrid)». «Todo estaba relacionado con el deporte, por eso ha llamado tanto la atención lo de bailar en mi país porque como siempre me han visto con los tacos de fútbol ¡Esto es cansado! Hay ensayos, viajes a Barcelona, la casa, el niño, los entrenamientos...pero merece la pena», resalta. Una «escuela de fútbol» Domingues le ha cogido el gusto a la pequeña pantalla, donde no le importaría presentar un programa infantil, proyecto que le ofrecieron en su país, «pero no era el momento porque estaba embarazada». «Me siento muy niña, me encanta jugar, y, aunque durante mi matrimonio aprendí mucho, mi espíritu sigue siendo infantil. Tengo mucho feeling con los chicos. Cuando deje de jugar, quiero crear una escuela de fútbol para los más pequeños», declara. Por el momento, esta joven de 26 años ha ganado sólo una gala de un concurso que tiene claro que ganará Rosa López. «Rosa lo tiene todo: baila bien, tiene carisma, es buena gente, le quieren mucho...Yo ya he ganado con estar en el programa, que me ha dado mucha popularidad». Querida por la gente y bien tratada por la prensa rosa, «a la que me tuve que acostumbrar porque en Brasil e Italia no es como aquí», piensa seguir en el fútbol «hasta que el cuerpo diga basta». «Tengo las mismas ofertas que tenía antes de entrar en ¡Mira quien baila! Este año tengo trabajo porque como está el Mundial, pues me han propuesto como comentarista. También ir a Gran hermano y La isla de los famosos pero dije que no. Si me vienen otros proyectos, los estudiaré».