Una voz muy añorada

Con sentimiento, ilusión y un recuerdo no empañado por el tiempo transcurrido se desarrolló el concierto de ayer en el Auditorio Ciudad de León, en el que la figura del compositor Ángel Barja se hizo casi presencia palpable para el muy númeroso público allí congregado. Enmarcado en la iniciativa de Renfe Un tren de valores , la música, la poesía y la palabra fueron las piezas con las que se confeccionó un acto entrañable que fue el más seguido de todos cuantos formaron parte de la jornada de clausura de la feria Leer León. El evento contó con un comienzo extraordinario al escucharse de nuevo las palabras -procedentes de una entrevista grabada- del gran compositor leonés, y que dieron paso a unas palabras del escritor y profesor Alfonso García. Después, algunos de los más representativos temas de Barja fueron interpretados por el Coro de Pueri Cantores Catedral de León, dirigido por Romualdo Barrera. Belén Ordóñez al piano, Sergio Meneghello a la guitarra y Luis López-Arróyabe a la flauta travesera estuvieron entre los excelentes músicos participantes. Intercaladas en el discurso musical, Alfonso García y el poeta berciano Juan Carlos Mestre -que acompañaba su voz de gran recitador con el melodioso sonido del acordeón- leyeron varias poesías, la mayoría del libro Música y poesía para niños (Everest), una deliciosa producción de García y Ángel Barja que ha sido recientemente reeditada. En presencia de varios miembros de la familia del músico y ante una representación notable de la sociedad y la cultura leonesas, el coordinador del suplemento literario del Diario, Filandón , hizo entrega de un simbólico ramo de flores a Ruth Barja, la hija del compositor. Durante todo el día de ayer, Renfe, la entidad promotora, repartió gratuitamente en la estación miles de ejemplares del libro Música y poesía para niños .