Preston: «La Ley de Memoria Histórica es un paso importante»

El historiador británico Paul Preston califica de paso «muy importante» la aprobación del Proyecto de Ley de Reparación Moral de Reconocimiento de los Derechos de las Víctimas de la Guerra Civil, también conocido como Ley de Memoria Histórica. El catedrático anglosajón dijo alegrarse del texto aprobado el pasado viernes en el Consejo de Ministros, pero mostró su disconformidad con que sean eliminados todos los símbolos franquistas y republicanos. A su juicio, se deben mantener y preservar todas las referencias porque «por mucho que duela, forman parte de la historia de España». El hispanista británico abogó porque se conserven los nombres de las calles, los monumentos y las estatuas «debidamente acompañadas de una clara y adecuada explicación» con el fin de que «sirvan de homenaje a las víctimas de ambos bandos». El prestigioso historiador también se mostró contrario a que se prohíban actos y manifestaciones de apoyo al franquismo. Dijo que no está a favor de restringir la libertad, «siempre y cuando no se rompan determinadas normas». Dos Españas, aún Preston, que participó en los cursos de verano de la Universidad Complutense, alabó el trabajo del Gobierno español asegurando que «ha demostrado un fuerte compromiso, a pesar de las trabas de una derecha, que nunca quiere nada». El historiador excusó la tardanza del Ejecutivo en desarrollar el texto apostillando que «teniendo en cuenta la situación en la que ganaron las elecciones, es normal que obren con mucho cuidado». El hispanista aclaró que todavía existe una división evidente en la sociedad española. «Si la gente no siguiera dividida nadie escucharía las tertulias de la Cope ni se venderían por millones los libros de gente como Pío Moa». Aseguró que se debería tener más en cuenta que «el olvido no significa reconciliación y que la memoria no significa venganza». El hispanista señaló que si hace 30 años le hubieran dicho que en pleno siglo XXI los españoles íbamos a seguir discutiendo cuestiones relativas a la guerra civil, «no me lo hubiese creído». Por ello, defendió el trabajo de los historiadores y criticó con fuerza al llamado revisionismo , al que acusó de ser «el resurgimiento de la propaganda franquista a través de la telebasura». A pesar de todo, Preston confía en que dentro de pocos años las heridas estarán finalmente cerradas y que poco a poco se suavizarán las tensiones y las crispaciones dentro de la sociedad española: «Cuando pasen unos cuantos años el tema de la guerra ya no estará tan candente». Paul Preston también quiso mostrarse crítico con la decisión de que finalmente no se anulen las sentencias de los tribunales militares. El hispanista afirmó que estas sentencias «carecen de ninguna legalidad porque se gestaron con bandos inventados que utilizaban la justicia al revés». En su opinión el que finalmente no se hayan anulado las decisiones de estos tribunales responde a «los intereses de algunos».