Diario de León

La asociación cepedana Rey Ordoño I también ha querido rendir un homenaje a Josep Renau

Villamejil expone hasta el 20 de agosto los mejores carteles de la guerra civil

La muestra «Rojo y oro» ha podido hacerse gracias a la colaboración del Ministerio de Cultura

La muestra hace un recorrido por la edad de oro del cartelismo español

La muestra hace un recorrido por la edad de oro del cartelismo español

Publicado por
E. Gancedo - león
León

Creado:

Actualizado:

El salón de actos del ayuntamiento de Villamejil, en la comarca de la Cepeda, a menos de veinte kilómetros de Astorga, se engalanó ayer para albergar una de las mejores exposiciones del verano en tierras leonesas, Rojo y oro , sobre el cartelismo en los años de la guerra y la obra del gran cartelista valenciano Josep Renau. Vecinos, miembros de la asociación Rey Ordoño I -organizadora de la muestra- y personas vinculadas a la Cepeda se dieron cita para dar la bienvenida a esta sugerente cita artística. «España siempre ha sido un país con tradición cartelista -cuenta Tomás Álvarez, periodista y escritor perteneciente a la citada asociación- vinculada, más que a su economía, a sus tradiciones festeras. Los primeros carteles taurinos en los que se combinó texto e imagen se publicaron hacia 1770, y también otras citas, como fallas, exposiciones y fiestas diversas, serían publicitadas desde entonces mediante el cartelismo, aunque éste no alcanzaría un desarrollo masivo hasta la segunda mitad del siglo XIX». En España, el momento álgido del cartelismo se vivió, cuenta Álvarez, en los días de la Guerra Civil. «En el caso español es muy evidente la influencia rusa, aunque también es palpable una mayor espontaneidad artística». «El cartel -continúa- transmite todo tipo de mensajes: valor para el combate, disciplina en el frente y la retaguardia, mantenimiento del sistema productivo, apoyo a la infancia, ánimo a la resistencia... Se enaltece la fortaleza y el heroísmo de personas y pueblos. En el cartel republicano se aprecia una notable fuerza, si bien el mensaje va perdiendo rotundidad a medida que se alarga el conflicto y la victoria va apareciendo cada vez más utópica. La desmoralización también trasciende al cartel». Por contra, argumenta Tomás Álvarez, «el falangismo acusa una falta de originalidad. Junto a algunos carteles de factura salvable abundan los de una excesiva simplicidad. En años posteriores el franquismo iría perfeccionando la capacidad para el cartelismo, aunque con cierta falta de espontaneidad». A la cabeza de todos estos grandes cartelistas está Josep Renau, pero también destacaron Bardasano, Alloza, Bas, Ballester, Goñi, etc. Josep Renau nació en Valencia en 1907; estudió Bellas Artes en esa capital y pronto trabajó para revistas y cartelería. En 1936 fue nombrado director general de Bellas Artes, y se encargó la tarea de defender el patrimonio artístico en la guerra. Él fue quien encargó importantes acciones de salvaguarda patrimonial y quien encargó a Picasso la realización del Guernica . Exiliado en México en 1939, trabajó allí con Alfaro Siqueiros. Tras una corta estancia en Nueva York, en 1958 marchó a Berlín Este. En su etapa berlinesa realizó importantes murales y participó en la Bienal de Venecia. A partir de 1976 viajó diversas veces a España para presentar obra en galerías de arte. Murió en Berlín en 1982. Horario: en el Ayuntamiento de Villamejil, por las tardes, hasta el 20 de agosto.

tracking