«Es un milagro que una productora apueste hoy por proyectos nuevos»

Escritora, guionista y directora de cine, la leonesa Estefanía Muñiz tiene muy claro que la perseverancia y el trabajo duro consiguen que los sueños se hagan realidad. Entusiasta y luchadora, abandonó el ejercicio del Derecho para dedicarse por entero al mundo del cine y a la literatura. Autodidacta, ha conseguido numerosos reconocimientos: su corto Ecos es uno de los seleccionados para el Festival de Cine de Nueva York, aunque asegura que el más grande de ellos es la entrega de sus obras al público. -¿Qué tal la experiencia de la pasada muestra de obras cinematográficas de Javier Gutiérrez? -Muy bien. Venir a León siempre me resulta una experiencia muy entrañable, aunque es verdad que la muestra podía haber tenido más cobertura, ya que en esta ciudad existe gran inquietud intelectual. -El último premio que ha recibido... -Hace sólo unos días en el Lago Film Fest en Revine (Italia) al mejor cortometraje con Ecos . -¿Qué trata de expresar con sus películas? -Con Construir transmito la finitud de la vida; una persona recibe la noticia de que su vida acaba, se enfrenta a una enfermadad terminal y aprende lo difícil que es construir y lo fácil que es destruir. La película tiene un final abierto pero algo negativo. Ecos habla acerca del perdón y de la culpa. La protagonista de la historia debe aprender a perdonar a los demás y a sí misma por su pasado. Yo pienso que el amor es la plenitud de todas las leyes. -¿Cómo autodefiniría sus guiones? -No lo sé... No perdería ni un segundo en autodefinirme a mí misma (risas) me resultaría aburridísimo. -También escribe cuentos y novelas... -Sí, me encanta, por eso empecé en el cine, que es mi enfermedad incurable. Sobre todo me apasiona la poesía. Escribo de manera visual. -¿Le ha costado mucho trabajo llegar a ser una directora de cine reconocida? -No. Pero el cine es un trabajo muy duro, cuesta muchísmo. No es algo que se haga de manera individual, no estás tú sola sino un equipo. Conseguir llevar una imagen a la pantalla es tarea de mucha gente pero es tan gratificante que merece la pena: que la gente lo reciba es un reconocimiento y un regalo. -¿Qué le resulta más sencillo, escribir literatura o dirigir una película? -Me resulta más difícil en todo caso la postproducción, es el momento más complicado de todo el proceso, más que la escritura de una narración y del guión e incluso más que el rodaje. -¿A qué formato pertenecen sus películas? -Todas son cortos, a excepción de Ecos que se puede considerar un mediometraje. -¿Siempre quiso ser directora de cine? -No, nunca me lo había planteado. Siempre quise escribir. Estudié Derecho por tradición familiar, pero cuando acabé tenía otra perspectiva: quería estudiar dirección. Me presenté al examen del ECAM pero lo suspendí y empecé a ejercer mi profesión (Derecho). Yo seguía escribiendo, iba mucho al cine y estudiaba por las noches arte dramático. No me gustaba el Derecho. Hice un curso en el Escorial, Literatura y cine , impartido por Giménez-Rico, una gozada de curso que me aportó mucho. Me animaron a seguir adelante con mi corto y conecté con gente que me aconsejó que adaptara el guión y que me ayudó a conseguirlo. En todos los cortos he trabajado con el mismo equipo y la verdad es que estoy muy contenta. -¿Le ha sido muy complicado conseguir que una productora apostara por sus trabajos? -Por Ecos la verdad es que menos de lo que me esperaba, estoy muy agradecida. En el cine es realmente un milagro que una productora apueste por tus proyectos. En este caso ha sido una discográfica que acaba de abrir una rama para cine:Exit movies, que está al mando de David Lera. -La música ocupa en sus obras un papel... -Esencial. Me importa muchísimo, es un elemento vital para hacer sentir. La música es enmarcadora de recuerdos, al igual que los olores, los atrapa. -Trabaja actualmente en algún nuevo proyecto? -Sí en el guión para un largometraje. También intento editar una compilación de poemas: Corazón ombligo . Lugar: Centro Cívico León Oeste Hora: 18.00. Entrada: gratuita.