Madonna tendrá en Moscú unas medidas policiales sin precedentes
Unos 3.500 policías, soldados del Ejército, efectivos antidisturbios y del ministerio del Interior garantizaron ayer la seguridad durante el primer concierto de Madonna en Moscú, parte de su gira mundial Confessions . Las autoridades de la capital rusa han adoptado unas medidas sin precedentes, debido a las supuestas amenazas de la mafia y las críticas vertidas por los integristas ortodoxos contra la diva del pop. El número de efectivos de las fuerzas de seguridad excede el movilizado para partidos de fútbol de gran riesgo, como el disputado el pasado fin de semana entre el CSKA y el Spartak, el derby por antonomasia del fútbol ruso. Para evitar aglomeraciones, las autoridades moscovitas han decidido cerrar durante veinticuatro horas la estación de metro más cercana al escenario del concierto, el estadio olímpico Luzhnikí, con capacidad para 85.000 espectadores. Se espera que más de 50.000 personas asistan al concierto.