La RAE prefiere «castellanoleonés» aunque en el 2005 dijo lo contrario
A pesar del fuerte rechazo social que genera la palabra, y no sólo en tierras leonesas, la defensa del término figura en una respuesta escrita de la RAE
Si el gentilicio es uno de los principales elementos de controversia en torno al contenido de los textos (en estos libros se emplea asiduamente el término castellanoleonés , a veces incluso como sinónimo de castellano, pero nunca el de leonés con contenido regional), ahora la Real Academia Española cree que ese vocablo es el que «debe usarse como gentilicio de Castilla y León» porque tiene la capacidad de «indicar de manera inequívoca la alusión a una entidad unitaria desde el punto de vista político-administrativo». A pesar del fuerte rechazo social que genera la palabra, y no sólo en tierras leonesas, la defensa del término figura en una respuesta escrita de la RAE a la que ha tenido acceso la agencia Efe, en la que se añade que el empleo «de los dos gentilicios unidos por la conjunción 'y' no permite deducir dicha unidad, sino que más bien tiende a interpretarse en referencia a dos entidades independientes», como ocurre con el término «castellano y leonés». Serbia y Montenegro La Academia profundiza en su teoría y la ejemplifica con el gentilicio utilizado en el caso de la ya inexistente República de Serbia y Montenegro al argumentar que la expresión «los ciudadanos serbomontenegrinos resulta inequívoca en su referencia a los habitantes de un Estado unitario, frente a los ciudadanos serbios y montenegrinos, que tiende a interpretarse en referencia a los ciudadanos de dos repúblicas independientes». Concluye la RAE que no resulta lingüísticamente apropiado «utilizar la expresión castellano y leonés como gentilicio de la comunidad de Castilla y León». Se da el caso que este «consejo» entra en contradicción con otra respuesta de la misma RAE de febrero del 2005 en relación a una pregunta de la asociación Plataforma Pro Identidad Leonesa: «Desde un punto de vista estricto, no es posible llamar castellanas a las provincias de León, Zamora y Salamanca». Son, pues, leonesas, «ya que no pertenecieron a Castilla la Vieja», dijeron entonces. La postura, ahora diferente, de la Academia, ha sido trasladada por la agencia Efe a los diferentes grupos parlamentarios representados en las Cortes, quienes abogan unánimemente por mantener en su propuesta de reforma del Estatuto la fórmula desaconsejada por la RAE: la usada en el artículo 8: «Derechos y deberes de los castellanos y leoneses». El portavoz del Grupo Parlamentario Popular, José Antonio de Santiago, defendió la fórmula acordada en la anterior reforma estatutaria de 1999, y negó que la decisión de utilizar el gentilicio castellano y leonés fuera una «concesión» a otras formaciones políticas. Por su parte, el portavoz socialista de Cultura, Óscar Sánchez, expresó el respeto hacia el «punto de vista» de la RAE pero subrayó que «lo válido es lo que figura en el Estauto de Autonomía». Abundó en que «estatutariamente no existen dos pueblos distintos, no hay castellanos por un lado y leoneses por otro, por lo que no hay dos tipos de ciudadanos, sino que todos son habitantes de la comunidad». Más tajante se mostró el leonesista Joaquín Otero, quien argumentó que «mientras exista la conjunción copulativa que une dos cosas distintas: León y Castilla», tendrá que «seguir existiendo» la fórmula de «castellanos y leoneses» porque «o se es castellano, o se es leonés, independientemente de que haya una estructura política y administrativa que los una». La «primera victoria» Otero recordó que fue su formación la que, en 1999, propuso la modificación estatutaria, ya que «antes el texto incluía la forma ciudadanos castellanoleoneses» y se refirió al cambio como «la primera victoria» del leonesismo. Por su parte, el Instituto Castellano y Leonés de la Lengua explicó que la discusión «evidencia que las lenguas, además de vehículos de comunicación, constituyen señas de identidad, inevitablemente afectadas por la situación política». Para la Fundación del Español Urgente (Fundéu), si se optara por utilizar el término castellano y leonés «no se estaría formando un gentilicio, sino dos, de forma que si se habla de 'las ciudades castellanas y leonesas' bien podrían ser ciudades que estén en cualquiera de las dos Castillas y ciudades que estén en León».