La soprano llegó a León el domingo para ensayar
Kiri Te Kanawa llegó en la tarde del domingo a León y, según su costumbre, fue directamente a conocer el Auditorio. Durante la mañana de ayer estuvo ensayando con Julián Reynolds, su pianista habitual, con el que la soprano ha dado numerosos recitales por todo el mundo. Si María Callas era la intensidad, Kiri TE Kanawa es la emoción. Si Callas era la valentía, Kiri es la dulzura. Cara y cruz de un arte que puede entenderse de formas muy diferentes pero siempre bajo un denominador común: la belleza. Pocas veces León podrá tener la oportunidad de escuchar una voz semejante.