El director de la Seminci admite que ésta no ha sido precisamente «una edición brillante»

El director de la Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci), el hispano-argentino Juan Carlos Frugone, reconoció ayer que no ha sido «particularmente brillante» la edición que finalizó anoche con la entrega de la Espiga de Oro al director serbio Goran Paskaljevic por el filme Optimisti . Frugone circunscribió este juicio al territorio de la ficción, no así al del documental, que en su opinión ha sido «excepcionalmente brillante», aseguró tras la lectura del palmarés, que corrió a cargo de la actriz Mar Saura. «Hemos hecho el festival que mejor hemos sabido y podido, pero también debemos tener en cuenta, si repasamos el año, que eso no ha ocurrido sólo aquí, sino también en otras ciudades españolas y del extranjero, donde no se ha visto una película especialmente relumbrante», añadió. Acerca de la proliferación de certámenes de cine en España, con el riesgo de que un resultado mediocre perjudique a la Seminci frente a otros festivales, Frugone dijo que no tienen por qué «excluirse unos a otros. La cuestión es que existan películas suficientes para alimentar las secciones oficiales». También habló de la dificultad del fallo, ya que en Valladolid no se ha visto «una película bomba o estrella».