«Es negativo que un diario tenga interés en otro sector»

Jaime Castellanos, presidente del grupo Recoletos, desde ayer preside la asociación que agrupa a los editores de prensa españoles. Asegura que hay que estar alerta para hacer frente no sólo a los retos conocidos, sino también «a los que están por venir». -Apenas hay ya empresas puramente periodísticas, sino grandes grupos con intereses en otros ámbitos, como la construcción. ¿Cómo ve esto? -Es muy negativo que las empresas de comunicación tengan intereses en otros sectores porque entonces ven mermado su gran valor, que es la independencia total. Esos intereses pueden conducir a conflictos diarios. -Los profesionales de la comunicación se enfrentan a menudo a problemas como contratos precarios, intrusismo... -La gran apuesta de los diarios ha de seguir siendo la de la calidad y la credibilidad, y la calidad nos la da gente cualificada y con talento, que es sobre todo en lo que hay que invertir. En ésta y en otras industrias existe ese tipo de problemas, pero tenemos que mirar al futuro con confianza y teniendo muy claro qué productos debemos ofrecer. -¿A qué retos inmediatos se enfrenta la Aede? -Internet y las nuevas tecnologías, que ya no son un reto, sino que forman parte de nuestra vida, pero con los que debemos hacer más complementario el diario impreso. También está la apuesta por la calidad y el hecho de no obsesionarse con las tiradas, que a veces reflejan cifras falsas. Tenemos que ofrecer productos que no estén hechos para los políticos o los grupos económicos, sino para los ciudadanos. -¿Asistiremos a la muerte del periódico en papel? -La presencia de Internet lo que hace es proporcionar más posibilidades, más canales de información, tenemos que saber aprovechar esas posibilidades, especialmente por su capacidad de atracción para los jóvenes. -¿Y la presencia, creciente, de la prensa gratuita? -Va dirigida a un tipo de público distinto, que busca la información rápida, algo plana, más relacionada con el mundo del ocio. El diario tradicional es un producto de mayor calidad, de lectura reposada, que ofrece análisis, y eso se paga, y quizá incluso haya de pagarse más. -¿Han de cambiar la estructura de las redacciones? -Las estructuras rígidas deben desaparecer; el futuro está en los profesionales que den respuesta a las nuevas alternativas.