Averiguar que el desplome de las dos gárgolas era «imprevisible» le ha costado a la Junta 50.000 euros

La Junta lleva invertidos 50.000 euros desde que se desplomaron dos gárgolas de la Catedral. El dinero se ha destinado a una limpieza urgente de todas las gárgolas y elementos de evacuación de aguas, la revisión de otros elementos voladizos, como pináculos, gárgolas y cresterías y la contratación de una empresa de geología para averiguar el estado de la piedra del templo gótico. Según los informes preliminares de los técnicos la caída de las dos gárgolas no se podía determinar de forma previa. Los expertos aseguran que no es un hecho puntual, sino que la Catedral ha perdido gárgolas de forma continuada desde tiempo inmemorial. Añaden que las dos últimas se desprendieron de una zona que se impermeabilizó en el 97. En su opinión, «no es probable que exista una razón única, sino una serie de factores concatenados».