El cuadro robado de Goya descansa en el Guggenheim

El cuadro de Francisco de Goya Niños del carretón encontró ayer su sitio en el Museo Guggenheim de Nueva York tras su robo y recuperación en noviembre durante su traslado a la ciudad de los rascacielos. La obra fue sustraída cuando iba camino de Nueva York para formar parte de la exposición Pintura española de El Greco a Picasso; Tiempo, Verdad e Historia, en la que hoy fue colgada con motivo del cierre al publico el jueves de la muestra. «Estamos muy contentos porque es un vuelta a la normalidad. Robos como los de este cuadro pueden retraer aún más a los coleccionistas a prestar cuadros, algo a lo que ya son reacios», dijo una de las comisaria de la exposición, Carmen Giménez. Conservadora del arte de siglo XX en el Guggenheim de Nueva York y comisaria de la exhibición junto a Francisco Calvo Seraller, Giménez consideró que quienes robaron el cuadro «no eran conscientes de lo que se llevaban». «Si hubieran sido conscientes de lo que se llevaban no se hubiera encontrado con tanta facilidad», comentó.