Paul Collins, «el último beat» llega a León para presentar libro y disco

La programación de exitosos y, en muchas ocasiones, multitudinarios conciertos del Gran Café (calle Cervantes, 9) trae hoy a León a todo un clásico del power-pop norteamericano, Paul Collins, dentro de su triunfal regreso y de su gira de conciertos para presentar el que es su nuevo disco, Paco & Juan (Lucinda records) y su primer libro, Mi madre,mi mentor y yo (ed. Gamuza azul) Santo y seña de la que fue una renovación pop caracterizada por el frescor y la brillantez, Paul Collins firmó con The Beat en el año 1979 el que es considerado por muchos como el mejor disco de power-pop de todos los tiempos, y desarrolló durante la década de los ochenta y primeros noventa una carrera plagada de grandes canciones. Ahora vuelve en plena forma, con un disco que mantiene un buen equilibrio «entre las canciones más vigorosas y explosivas y los emocionantes e intensos medios tiempos que evidencian la madurez y la credibilidad de un músico que vuela de nuevo tan alto como en sus mejores tiempos», a decir de la crítica especializada. Un retorno que evidencia cómo el espíritu del rock n'roll más clásico continúa vigente. Además, Collins viaja acompañado por una banda que supone un auténtico lujo musical y con la que quiere volver a situarse en primera fila del pop internacional. Más conocido en España que en cualquier otro país del planeta, los dos primeros álbumes de Paul Collins son auténticos clásicos del género y las potentes canciones que los conformaban han sido y siguen siendo un modelo admirado e imitado por cientos de bandas en todo el mundo. Los Beat se formaron en San Francisco tras la disolución de los germinales Nerves, en los que Paul tocaba la batería, mientras que Peter Case y Jack Lee se ocupaban de la guitarra y el bajo respectivamente. Rápidamente, los Beat ficharon por la compañía de management de Bill Graham, quien a su vez les proporcionó un prometedor contrato con Columbia. Su extraordinario álbum de debut, una increíble sucesión de canciones radiantes, enérgicas, directas y refrescantes, grabadas, además, con un espléndido sonido derivado en buena medida del patente entusiasmo de la banda, se convirtió casi inmediatamente en una referencia ineludible para cualquiera que, desde aquel entonces, se haya dedicado al pop de guitarras más enérgico, renovador y vibrante. Tras una serie de cambios en la formación de The Beat y diversos problemas con la compañía discográfica, la banda volvió a los estudios: The kids are the same (1982) es otra excelente muestra del talento de Collins para escribir «magnéticas y emocionantes canciones con un poderoso cargamento melódico y un vigoroso y versátil sonido de guitarras». A partir de entonces, Paul y su bajista Steve Huff se convirtieron en los únicos miembros fijos de la banda, reclutando baterías y guitarristas de forma ocasional. El tercer disco fue un mini-Lp, To Beat or Not To Beat , editado por una pequeña compañía. El disco contenía la formidable All over the world , que sonó con insistencia en las emisoras españolas de la época. Otro mini-álbum, Long Time Gone , fue editado por el sello francés Closer. Sus estancias en España comenzaron a prolongarse a mediados de los ochenta, fichando incluso por el sello independiente madrileño Twins, que editó Live at The Universal , grabado en la ya desaparecida sala de la plaza de Manuel Becerra. Hora: 22.00. Lugar: calle Cervantes, 9. Entradas: 12 euros en taquilla.