«Me gustaría poder crear clones del Musac en cada ciudad británica»

David Barrie, director del Art Fund, una organización británica de importancia capital en la conservación del patrimonio (ha salvado cerca de un millón de tesoros en el Reino Unido), visitó ayer el Musac para analizar su plan museológico y su política de adquisiciones con el fin de implantarlo en los museos provinciales de Gran Bretaña. Asegura que los poderes públicos deben implicarse en democratización del arte, desacraliza la situación actual de los museos en el reino Unido y cree imperativo iniciar un diálogo valiente del mercado con los creadores de los países emergentes. -¿Qué es exactamente lo que le ha traído hasta el Musac? -Conocí a Agustín Pérez Rubio (conservador jefe del Musac) el año pasado en la feria de arte Frizie de Londres. Yo ya había oído que el Musac estaba desarrollando un proyecto excitante. Agustín me transmitió toda su energía y entusiasmo y me quedé tan impresionado que pensé que tenía que venir y verlo con mis propios ojos. -Y ¿desde el punto de vista meramente profesional? -Mi organización ha puesto en marcha un plan para ayudar a los museos regionales británicos a que sean más ambiciosos, más audaces, como el Musac. -Creía que ya lo eran. -Lo que ocurre es que los museos en el Reino Unido están demasiado volcados en adquirir artistas británicos y se pierden la obra de los creadores extranjeros. Creo que hoy en día, más que nunca, todo está conectado y, además, hay extraordinarios artistas en todo el mundo que nos estamos perdiendo. Así que estamos a punto de lanzar una nueva iniciativa para que todos estos museos dejen de mirarse al ombligo y comiencen a observar lo que se hace en el resto del mundo. -Esa es más o menos la filosofía del Musac. -Exactamente. Para mí es increíble la generosidad que el gobierno de Castilla y León demuestra financiando este proyecto. Cuando vuelva a Londres les diré a los diputados: miren el proyecto de vanguardia que se está desarrollado en Léon, un lugar que, aparentemente, parecería fuera del mundo de arte contemporáneo. Este es un centro excitante, con exposiciones apasionantes de artistas procedentes de todo el mundo y con unos fondos realmente excepcionales, adquiridos gracias a la generosidad del dinero público. -Me llama la atención que le sorprenda que la administración invierta en centros artísticos. -En mi país, hemos hecho un estudio analizando cerca de 300 museos. Pues bien, el 60% de ellos han reconocido que no reciben fondos públicos para adquisiciones, así que tienen grandes problemas para realizar nuevas compras. -¿También la Tate Gallery? -También. La situación es bastante lamentable porque se destina muy poco dinero a la compra de obras de arte y tampoco hay incentivos fiscales, como ocurre por ejemplo en Estados Unidos. Así que, creáme, el esfuerzo que esta región está haciendo por el Musac es digno de elogio. Este museo es como un faro, entre otras cosas porque permite a la gente conocer el arte de nuestros días. -Y, además, creo que es una fuente de riqueza. -Absolutamente, es una gran inversión desde el punto de vista económico. Crea una gran demanda y genera mucha actividad económica alrededor. -¿Cree que un museo como este sería posible, por ejemplo, en Yorkshire, un lugar parecido en cierto sentido a León? -En realidad, hay una institución maravillosa en Yorkshire. Es un parque escultórico al aire libre, pero me encantaría ver clones del Musac en varias ciudades del Reino Unido. -¿Cuáles son los esenciales hoy en día en un museo de arte contemporáneo? -Resulta muy difícil saber si lo que hoy compras pervivirá en el futuro. En contadísimas ocasiones surge una genialidad, pero en la mayoría de las veces tan sólo puedes desear. Es decir, creo que lo que debe hacerse es intentar tener un gran abanico de posibilidades. Fíjese, mediados del siglo XX, nuestros museos se concentraron tan sólo en artistas británicos, con lo que hoy en día tenemos una carencia increíble de Picassos o Matisses, por ponerle un ejemplo. Hay que ampliar la visión y, además, comprar la obra antes de que adquiera precios desorbitados. Necesitas imaginación, curiosidad y hay que viajar mucho. -¿Cuál debe ser la relación entre los artistas, los comisarios y los marchantes de arte? -Es cierto que el comercio artístico está dominado por el dinero, pero al final el dinero es esencial. Cuando un artista comienza, lo que quiere es publicitarse y para los comisarios a veces es muy difícil tratar con marchantes, pero, al final, los artistas necesitan ayuda.