«Hoy en día, el hombre de letras es más necesario que nunca»

-¿Para qué estudiar egiptología? -Hace unos años se me dio la posibilidad de impartir una clase a estudiantes de Historia y tomé la decisión de plantearme esa pregunta para la que yo también necesitaba una respuesta. Parafraseé a Hölderlin: «¿Para qué egiptólogos en tiempos de penuria?». Por que hoy, más que nunca, no sólo el egiptólogo, sino el hombre de letras es más necesario que nunca. -Sí, pero ¿qué mueve a un niño de León a estudiar jeroglífico? -Tanto el interés como la calidad no son una cuestión de número. Cuando me siento junto a los alumnos en las aulas del IBO en San Isidoro, la maravillosa comunidad que nos acoge, se que todos ellos están dando lo mejor de sí mismos. No acuden por un interés material. No recibirán dinero, ni prestigio social (aunque se lo merezcan), ni un título que seguirá a un puesto de trabajo. Y esto, en la sociedad que hemos creado, merece un elogio para el que a todos nos faltan palabras. En mi corta carrera, nada me ha satisfecho más que el contacto con corazones tan apasionados y mentes tan dispuestas. A ellos les adeudo tanto nuevos conocimientos como el mantener mi propia ilusión por el estudio. Cuando uno se encuentra ante gente de esa talla toda exposición dogmática y aleccionadora debe dejar paso a la conversación y la reflexión.